Cynoglossum zeylanicum Chill Out - Lengua de perro

El Cynoglossum zeylanicum 'Chill Out', también conocido como Nomeolvides Chino, es un encantador dúo de nomeolvides anuales que producen una masa de diminutas flores en tonos azul cielo o blanco, desde mediados de primavera hasta finales de verano. En conjunto, es ideal para crear un movimiento de colores relajante y dar vida a lugares un poco desatendidos. Esta planta es tan feliz en nuestros climas que se auto siembra de manera duradera a lo largo de los años, intemporal, casi eterna. Se desarrolla en suelos más bien frescos, fértiles pero no en exceso, y bien drenados, en la semisombra de los bosques, o en macizos y rocallas soleados.

El nomeolvides chino es una planta de la familia de las boragináceas, originaria de praderas y regiones montañosas, en claros de bosques y en los bordes de los bosques del este de China, pero también de la India, el Himalaya y Afganistán. Esta planta bienal, generalmente cultivada como anual, forma rosetas de hojas lanceoladas y nervadas, cubiertas de pelos rígidos, de un verde algo opaco, de donde emergen de mayo a agosto tallos peludos ramificados en su parte superior, que alcanzan al menos los 50 cm de altura, con inflorescencias en racimos terminales que agrupan pequeñas flores de 5 pétalos en tonos azul cielo o blanco según las plantas, que se asemejan mucho a nuestros nomeolvides del bosque. El nomeolvides chino se auto siembra abundantemente en el jardín.

 
El nomeolvides chino posee la robustez de las plantas silvestres. Tradicionalmente se usa para realzar las bulbosas de primavera (Narcisos, jonquillas, la primavera común), los iris pigmeo o los tulipanes, aligerando sus floraciones. También se puede plantar en grupos amplios en los macizos de plantas vivaces, los bordillos y en las macetas. En regiones más cálidas, se desarrollará en semisombra junto a los corazones de María. Las flores ligeras de los nomeolvides chinos son muy decorativas en los ramos de primavera, para realzar grandes flores (especialmente las peonías o las rosas). Esta planta tan sencilla es ideal para alegrar las zonas un poco descuidadas del jardín.