Gomphrena haageana Orange

La Amarantine Naranja, conocida en latín como Gomphrena haageana y también llamada Amaranto globo de Río Grande o Gomphréna écarlate, es una bonita anual que florece en el verano, con flores que se asemejan a pequeñas fresas. Esta selección, rara en cultivo, ofrece flores de color naranja escarlata cuando las otras amarantinas son rojas, rosas o blancas. Las flores están sostenidas por largos tallos robustos de 75 cm. Permiten componer ramos de julio a septiembre y pueden prolongar la temporada al secarse.

El Gomphrena haageana pertenece a la familia de las Amarantáceas o Quenopodiáceas. Es originaria de México, donde crece en laderas rocosas entre 1200 y 1500 m. Es menos común que el Gomphrena globosa. Esta Amarantine de gran tamaño se coloca más a menudo en medio de macizos. Dado su porte, su efecto será más marcado si se instala en grupo. De hecho, la planta tiene varios tallos, pero erectos y llevando en su extremo una flor única de forma globosa. Además, las hojas lanceoladas y alargadas son bastante pequeñas (5 cm) y están unidas cerca de su tallo (sésiles). El efecto proporcionado será, por lo tanto, aportado por varias plantas. Su color vivo, realzado por un follaje verde, un poco azulado tirando a gris, encontrará naturalmente su lugar en un conjunto de colores variados, pero también alegrará un fondo más neutro. La Amarantine, originaria de América Central, prefiere una exposición soleada.

Gráfica, la amarantine es una planta que se dispersa en medio de otras anuales o perennes. Sus múltiples cabezas redondas crean unidad en un macizo diversificado. Instálalas con cosmos, lavandas o margaritas, por ejemplo. De lo contrario, plántalas en masa variando los colores. También es una bonita flor de huerto. Atrae a los insectos polinizadores, especialmente a las mariposas.

Al igual que algunas de sus parientes en la familia de las Amarantáceas, se puede utilizar en composiciones secas. De hecho, Amaranthus significa en griego: "que no se marchita". Para conservarlas en su aspecto más halagador, no dudes en cortarlas tan pronto como aparezcan las flores y tomen color, así conservarán su forma y color evocadores.

Este "campo de fresas", como lo llaman los ingleses, se expresa tanto en el jardín como en macetas en una terraza o incluso en el interior, en ramos frescos o secos.