Rudbeckia hirta Cherokee Sunset

El Rudbeckia x hirta Cherokee Sunset es una planta vivácea efímera creada por Thompson & Morgan después de 10 años de rigurosas selecciones. Se distingue por sus flores dobles o semidobles en tonos cálidos como los de las puestas de sol de un verano indio. Las cualidades de esta variedad híbrida han sido premiadas en Estados Unidos con un « All America Selection Award ».

Su altura es ligeramente inferior a la de otras variedades de la especie hirta que alcanzan los 100 cm.

El Rudbeckia Cherokee Sunset es una planta vivácea efímera cultivada como planta anual o bienal. De hecho, en el jardín no durará más de 2 a 3 años, pero se resiembra espontáneamente con bastante facilidad.
Las flores de Rudbeckia Cherokee Sunset son grandes margaritas (capítulos) solitarias dobles o semidobles con pétalos amarillo oro, naranja, bronce o caoba. El diámetro de las flores es de aproximadamente 7 a 10 cm. El gran número de flores que se renuevan de julio a octubre forma una masa impresionante. Los largos y fuertes tallos del Rudbeckia Cherokee Sunset lo destinan a ser plantado en macizos y constituye una fuente de suministro de flores frescas para la realización de magníficos ramos de verano.
Al final de la temporada estival, los pétalos se marchitan y caen, luego el corazón de las flores se seca y momifica. Las flores podrán ser recogidas e incorporadas en un ramo seco.

La follaje está compuesta por un manojo de hojas basales lanceoladas, dentadas, de color verde oscuro de 5 a 10 cm de donde se elevan tallos florales robustos y ramificados. Los tallos llevan hojas caulinares más estrechas y de forma más bien ovalada.

Rústico, el Rudbeckia x hirta Cherokee Sunset prefiere situaciones soleadas o semisombreadas. Para el suelo prefiere un suelo rico, pesado y fresco pero sobre todo bien drenado. Es una variedad particularmente resistente al tiempo lluvioso.

Un activo ecológico: Durante todo el verano, las flores melíferas de los Rudbeckias atraen a los insectos polinizadores y a las mariposas a tu jardín. Una buena manera de mejorar el ecosistema de tu jardín y favorecer la producción de frutas y verduras en tu huerto. En otoño podrás admirar el constante ballet de los pájaros que vendrán a alimentarse de las semillas maduras que encontrarán en el corazón de las flores secas.