Rosal Baron Girod de l'Ain

El Rosal antiguo Baron Girod de l'Ain, es, según el Journal des Roses de marzo de 1906*, una obtención bastante original: « Esta extraña y muy bonita variante, no es otra cosa que un accidente producido por un rosal Eugène Fürst, en los viveros de M. Reverchon, horticultor en Moulin-à-Vent, cerca de Lyon (Ródano), y que ha sido fijado de manera casi absoluta. » Premiado en su momento y desde su introducción en el mercado (1897), este rosal arbustivo produce flores dobles, en copas abiertas, de un hermoso rojo carmesí a violáceo, cuyos pétalos despeinados están ribeteados de blanco. Este arbusto es bastante trepador, y sus corolas exhalan una fragancia embriagadora y afrutada de flor oscura. Constituye en los macizos un excelente contrapunto a los rosales pastel y románticos.

 (*Pierre du Plouy)

El rosal Baron Girod de l'Ain, obtenido fortuitamente y con éxito por el rosalista Reverchon en 1897, forma parte de los rosales híbridos remontantes antiguos. Esta variedad forma un arbusto de 1m a 1.30m de altura por 90 cm de ancho. Florece por primera vez en junio-julio, y luego de nuevo en septiembre-octubre. Sus rosas, de 7 a 8 cm de ancho, están compuestas por varias filas de pétalos irregulares, dentados, dispuestos en una roseta libre, bien abierta, dejando ver solo tardíamente el corazón amarillo dorado de la corola. El color dominante es un rojo carmesí y profundo en plena floración, cambiando la corola en su conjunto a rosa-violáceo con el tiempo. La originalidad del color proviene de un fino borde blanco que enmarca cada pétalo. El follaje, en general muy sano, es sin embargo sensible al óxido. Su color es un verde claro de aspecto mate. Los frutos, llamados escaramujos, tienen un color rojo anaranjado a marrón.

Temiendo las exposiciones demasiado calurosas, el rosal antiguo Baron Girod de l'Ain es una planta que tolera bien la media sombra. Sus flores pueden usarse en ramos, pero también es un hermoso ejemplar aislado o mezclado en un macizo de rosales ingleses o antiguos en tonos pastel. Forma un contraste elegante con las flores simples y cambiantes del rosal de China 'Mutabilis' o incluso con las corolas simples, naranjas a cobrizas, de Rosa foetida bicolor. También se ve hermoso junto a las flores de pensamiento del rosal 'Blue Eyes'. Su desarrollo modesto le permite integrarse en los macizos de vivaces, donde acompaña maravillosamente a los geranios perennes, la juliana, o las Boca de lobo púrpuras. Por último, debido a su fragancia, merece ser plantado no muy lejos de un paso, una entrada, o debajo de una ventana.