Rosal rugosa Roseraie de l'Haÿ

El Rosal antiguo 'Roseraie de l'Haÿ' cautiva primero por el potente y suave aroma de sus rosas bien dobles, y luego por su intenso colorido, un rosa púrpura oscuro, que resalta bellamente sobre un follaje verde claro, de aspecto abollonado, que se vuelve amarillo dorado en otoño. Al igual que su antepasado el Rosa rugosa, produce tallos muy espinosos y forma un un arbusto vigoroso e inmune a enfermedades. Sus hermosas rosas florecen abundantemente en mayo-junio, y luego de nuevo en septiembre. Indispensable en un seto defensivo o paisajístico y muy resistente, esta variedad soporta perfectamente las salpicaduras marinas y los suelos arenosos.

Magnífico logro hortícola, el rosal 'Roseraie de l'Haÿ' nació en 1901, de las manos de los hermanos Cochet. Proviene, entre otros, del Rosa rugosa, el Rosal de Japón originario del Lejano Oriente, habitante de costas y dunas arenosas, dotado de una notable rusticidad. 'Roseraie de l'Haÿ' crece en un arbusto redondeado, que puede alcanzar los 2 m en todas direcciones. Sus tallos, bien rectos, muy ramificados, son marrones y erizados de aguijones. Portan a finales de primavera y luego a finales de verano rosas solitarias o agrupadas de tres en tres, de 8 a 10 cm de diámetro, dobles, en forma de copa plana. Los capullos, muy puntiagudos, se abren poco a poco, en flores que muestran diversas tonalidades de rojo, rosa oscuro, carmesí, escarlata, púrpura, fucsia, desvaneciéndose en violáceo. Estas tonalidades van acompañadas de una textura brillante y aterciopelada, y de un perfume embriagador a rosa antigua, miel y clavo, perceptible a varios metros a la redonda. El follaje, abundante hasta la base de la planta, está compuesto por hojas de aspecto abollonado, divididas en folíolos bastante claros y brillantes. Y al final de la temporada, mientras termina la floración, las ramas se vuelven beiges y las hojas adquieren un hermoso tono amarillo dorado. Este rosal no produce frutos y tiende a retoñar por la raíz.

La pasión por los rosales antiguos es tanto muy extendida como ampliamente justificada: estos rosales son no solo los progenitores de nuestras rosas modernas, sino también y siempre las glorias de nuestros jardines. Rosa (x) rugosa 'Roseraie de l'Haÿ' es un rosal vigoroso, ideal en un paisaje de boscaje o seto defensivo, ya que el equilibrio entre el follaje y las flores es perfecto y forma una masa espinosa difícil de atravesar. Se puede asociar con cotinus, lilas, seringats, buddleias o incluso con viornes, arbustos de carácter campestre y igualmente fáciles de cultivar. Su intenso y floral perfume es digno de estar en un jardín de fragancias. Por último, es un excelente arbusto a orillas del mar, para plantar en primera línea, pero en un suelo que se mantenga fresco.