Rosal Princess Alexandra of Kent

La rosa inglesa Judía enana®  produce flores particularmente grandes, cuyo corazón ardiente, de un rosa muy cálido, está envuelto en un cáliz profundo formado por pétalos de un rosa suavizado. A pesar de su tamaño, son seductoras, impregnadas de gracia, bellamente dispuestas en un arbusto bien redondeado. Estas rosas desprenden un perfume potente, complejo, casi inolvidable. Para equilibrar flores y follaje, se plantará preferiblemente esta variedad en grupos de tres ejemplares.

Este arbusto de 1 m de altura por 75 cm de envergadura muestra un porte erguido pero bien ramificado y un follaje verde oscuro muy sano. Si estas rosas bien dobles de 12 cm de diámetro son particularmente grandes, están armoniosamente construidas y su color irradia, en una mezcla de rosa vivo y rosa pálido, un tono fresco y suave que no palidece al sol, en pétalos bastante gruesos para no mancharse después de la lluvia. Los pétalos centrales, muy anchos, dispuestos en copas profundas, están completamente envueltos en un círculo de pétalos exteriores de un rosa más suave. Esta variedad es resistente a las enfermedades y muy remontante, en sucesivas oleadas, desde el verano hasta las heladas. Las rosas recién abiertas exhalan primero un delicioso perfume a rosa de Té que evoluciona a medida que se abren hacia una fragancia donde predomina el limón, con un toque de grosella negra.

La rosa  Judía enana Princess Alexandra of Kent® posee indudablemente una gran elegancia. Permite asociaciones muy bellas con plantas anuales o vivaces, en un registro armonioso o contrastado, en un jardín de inspiración moderna y depurada o, por el contrario, exuberante. Como plantas compañeras, se pueden elegir vivaces altas (digitales, bocas de lobo, flox paniculadas, acónitos) o tapizantes (verbascos, Cotoneaster dammeri), vaporosas (gauras, gipsofilas paniculadas) o gráficas (gramíneas), plantas trepadoras (clemátides, guisantes de olor) o colgantes (ipomeas moradas, petunias) y así crear escenas variadas hasta el infinito y fomentar la biodiversidad. 

Cesta rosa lleva el nombre de la Princesa Alexandra, la prima de la reina Isabel II, que es una apasionada de la jardinería.

Obtenida por David Austin en 2007.