Rosal Crémet d'Anjou

El Rosal Crémet d'Anjou® es una variedad premiada por su perfume. Sus grandes rosas dobles, blancas y turbinadas son tan deliciosas como el postre celebrado en su momento y en estos términos por Curnonsky, el Príncipe de los gastrónomos: «El crémet angevino es un festín de los dioses. Ninguna crema chantilly iguala a este pequeño mulón espumoso, perfumado, untuoso y ligero». Maravillosa evocación para la floración remontante de esta creación, perfectamente realzada por un hermoso follaje verde oscuro. Además de sus cualidades ornamentales, este rosal también es muy resistente a las enfermedades.

El Rosal Crémet d'Anjou® 'Weklicrypep', introducido recientemente en el mercado, recibió el Premio al perfume en el concurso de las rosas nuevas de Bagatelle (París) en 2020. Es un pequeño arbusto de porte erguido, de crecimiento vigoroso y rápido. Al final, alcanzará aproximadamente 75 cm de altura, con 50-60 cm de envergadura. De mayo a junio hasta tarde en la temporada, se forman grandes rosas de forma perfecta, solitarias, llevadas por largos tallos espinosos. Están compuestas por múltiples pétalos blancos, teñidos de crema en el corazón de la flor. Su perfume, potente, es más perceptible en tiempo cálido y tranquilo. La resistencia a las enfermedades de este rosal es buena. Este arbusto caducifolio y muy resistente pierde sus hojas en otoño. Dará lo mejor de sí mismo plantado en una tierra rica, profunda, que permanezca un poco húmeda en verano para apoyar la producción de flores.

Este rosal moderno Crémet d'Anjou encontrará su lugar en el jardín en un gran macizo de rosas, en el frente de un macizo arbustivo o plantado en grupo de 3 ejemplares aislados en un pequeño jardín bien cuidado. Su floración blanca combina con todos los colores del jardín. Piense en instalarlo cerca de plantas muy fáciles de cultivar como los geranios vivaces (Geranium Blue Cloud, Anne Folkard, Nimbus, Orion), las campanillas (lactiflora, rapunculoides), mentas de gato, sálvias vivaces, Perovskia, Caryopteris... Los buddleias enanos también son buenos compañeros para los rosales arbustivos. Sus flores permiten hacer ramos que perfumarán la casa.

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