Rosal Les Années Folles Trocadéro

El Rosal Trocadero (Tan 10721) es un híbrido moderno de la serie 'Les Années Folles' que combina en sus grandes rosas románticas la elegancia del rojo cereza y un suave perfume. Además de sus cualidades ornamentales, es un arbusto robusto y muy resistente a las enfermedades de los rosales. Sus flores opulentas, de estilo antiguo, llenas de pétalos fragantes, permiten componer magníficos ramos. ¡Coloque este rosal en una esquina del jardín o cerca de la terraza para disfrutarlo en cada paso!

El Rosal 'Trocadero' es un reciente logro del rosalista alemán Tantau. Este rosal híbrido de té pertenece a los Floribunda, cuyas flores se agrupan en corimbos o pequeños ramos.

La planta forma un arbusto erguido, ramificado, de crecimiento vigoroso y rápido. Alcanzará aproximadamente los 85 cm de altura, con 70 cm de envergadura. Florece desde mayo-junio hasta bien entrada la temporada. Los jóvenes retoños de este rosal son purpúreos, se despliegan en hojas compuestas por folíolos dentados de un verde oscuro brillante, poco sensibles a enfermedades. Las flores miden entre 10 y 12 cm de diámetro y están compuestas por 140 pétalos. Tienen una forma globosa y se abren al estilo de los rosales antiguos, en cuartos apretados. El color de las rosas es un rojo cereza profundo, muy luminoso. Su perfume es pronunciado. Este pequeño arbusto caducifolio y muy resistente pierde sus hojas en otoño. Dará lo mejor de sí mismo plantado en una tierra rica, profunda y que permanezca fresca en verano.

Este rosal moderno Trocadero es una variedad de gran clase, tan bella como gratificante. Colóquelo, por ejemplo, al frente de un macizo arbustivo, en grupos de 3 a 5, en un seto bajo o aislado en un pequeño jardín cuidado. También se puede cultivar en una maceta grande, con aportes regulares de agua y fertilizantes. Piense en combinarlo con pequeñas flores blancas, azules, rosas que lo realzarán sin eclipsarlo. Los geranios vivaces, las mentas de gato, las campanillas (lactiflora, rapunculoides), las salvias vivaces y las digitales son buenos compañeros para los rosales. Sus flores, que duran mucho tiempo en un jarrón, permiten crear ramos llenos de audacia que perfumarán la casa.