Rosal Leo Ferré (Rosal de pie alto)

El Rosal en estándar 'Léo Ferré' forma un pequeño árbol con una corona compacta, adornado con grandes rosas originales, con una coloración particularmente contrastante. Sus flores en forma de turbina, generalmente bicolores, lucen pétalos blancos con base amarilla bordeados de rojo carmesí. En floración de junio a octubre, esta variedad también será apreciada por su resistencia decente a las enfermedades. Como todos los rosales en estándar, se instala bien a la vista en el jardín o en una maceta en la terraza. Sus rosas también son muy duraderas en un jarrón.

Los rosales en estándar se obtienen mediante el injerto de una variedad (aquí Léo Ferré) en un tronco único y bien vertical perteneciente a un rosal diferente (Rosa canina, R. laxa o R. multiflora),  realizándose el injerto a una cierta altura, aquí a 90 - 100 cm del suelo. En regiones muy frías, puede ser útil proteger el portainjerto en invierno.

El Rosal Léo Ferré®  (Adabiterse) forma parte de los híbridos de Té, reconocibles por la hermosa forma en turbina de sus flores. Se trata de un cruce creado por Michel Adam en 2006. Injertado en estándar, tiene un porte característico, con una corona compacta. Sus flores son muy dobles, amplias de 12 a 14 cm, ligeramente aplanadas. Las ramas, robustas y espinosas, llevan un follaje sano, de color rojizo cuando es joven, tornándose verde oscuro y lustroso. Su resistencia a enfermedades es buena en condiciones de cultivo adecuadas. Las flores son solitarias, llevadas por largos tallos muy resistentes. La planta carece de hojas en invierno.

Este Rosal en estándar Léo Ferré, con su silueta de pequeño árbol y sus grandes flores vivamente coloreadas, encontrará su lugar en el centro de un gran macizo de rosas, aislado en un jardín cuidado, alineado a lo largo de un camino o incluso en una maceta en la terraza.  Se asocia perfectamente con rosales blancos y bonitas plantas vivaces muy fáciles de cultivar como los geranios vivaces (Geranium Blue Cloud, Anne Folkard, Nimbus, Orion), las campanillas (lactiflora, rapunculoides), mentas, ásteres, digitales...  Sus flores permiten hacer ramos llenos de alegría, con follajes de helecho, por ejemplo.