Clematis Mme Lecoultre

La Clematis Madame Lecoultre es la más conocida de las clemátides trepadoras de grandes flores blancas, pero también una de las más fáciles de cultivar. Esta antigua variedad, obtenida en Francia en 1885 por Auguste Boisselot, encanta siempre por la blancura perfecta y la plenitud de sus grandes estrellas con pétalos anchos. Además, florece abundantemente y en dos ocasiones durante la temporada, a finales de primavera y de nuevo a finales de verano. Con un desarrollo moderado pero lleno de vida, esta hermosa liana es imprescindible en un jardín pequeño o en una terraza romántica. Es magnífica, generosa, insustituible con rosales trepadores. 

Las clemátides pertenecen a la familia de las ranunculáceas. Se encuentran en ambos hemisferios, especialmente en Europa, en el Himalaya, en China, en  Australia, en América del Norte y Central. La variedad 'Madame Lecoultre' (sinónimo Marie Boisselot) es un antiguo híbrido hortícola originado entre otros de la Clematis patens. Ha recibido un « Award of Garden Merit » de la Real Sociedad de Horticultura británica (RHS). Esta planta perfectamente vivaz es rústica, semi-leñosa y trepadora, alcanzará aproximadamente 3 m de altura, con un diámetro de 2 m. 

Esta clemátide lleva flores estrelladas con ocho pétalos anchos y redondeados superpuestos en la base, de 18 a 22 cm de diámetro, que aparecen en junio-julio sobre los brotes provenientes de la madera del año anterior, y nuevamente en los brotes del año, a finales de verano en septiembre. Las flores son solitarias o agrupadas en cimas y particularmente abundantes. Su color es un blanco puro, apenas teñido de amarillo en las nervaduras medias de cada tépalo. El centro de la flor está adornado con un corazón de estambres con filamentos crema y anteras amarillas. La floración es seguida por frutos decorativos plumosos gris plateado que perduran hasta el invierno. Las hojas, pinnadas, divididas en 3 a 5 folíolos en forma de corazón, glabras, son del tipo patens, de un verde bastante oscuro. Esta clemátide se sujeta al soporte o a la planta huésped mediante pecíolos transformados en zarcillos. El follaje desaparece en invierno.

Plante sus clemátides junto a sus rosales trepadores o lianas para prolongar la floración de sus muros y pérgolas hasta finales del verano. Es un género rico en diversidad, existen de todos los colores, formas y tamaños. Aproveche su facilidad de cultivo para brindar a su jardín pero también a su balcón un aire romántico y bohemio. 'Madame Lecoultre', al igual que los guisantes perennes, adora enredarse en los arbustos y se comporta muy bien en una maceta grande, con el pie en la sombra y la cabeza al sol. Sus flores cortadas duran mucho en un jarrón, permiten crear hermosas composiciones florales para embellecer su interior.