Clematis stans

Pareciera que para muchos, las clemátides evocan esas grandes lianas enmarañadas en las que florecen grandes flores en forma de estrella de varios colores. Las clemátides que aquí le ofrecemos son especies herbáceas, es decir, que no trepan. Algunas son arbustivas: la base de la planta es leñosa, mientras que otras son rastreras. Sus flores, aunque menos vistosas, poseen una elegancia incomparable y, para rematar, están delicadamente perfumadas. Tardan en fijarse, a menudo languidecen el primer año y crecen de forma exponencial en los años siguientes.

Esta bonita especie forma un pequeño arbusto compuesto por hojas dentadas con tres folíolos. Las delicadas flores forman un pequeño tubo azul pálido curvado en el extremo. Están seguidas de frutos plumosos muy decorativos. ¡En una pendiente fresca o en el borde del sotobosque, esta clemátide garantizará el espectáculo durante muchas semanas!