Clematis Wildfire

La Clemátide 'Wildfire' es una variedad reciente de clemátide híbrida con flores inmensas de 15 a 20 cm de diámetro en colores bicolor muy vivos! De mayo a junio y en septiembre, esta trepadora caduca despliega estrellas compuestas por grandes sépalos violeta intenso o azul violáceo profundo con amplias medianas rojo fuego brillante. Todo ello resaltado por un corazón provisto de estambres blancos cremosos con antenas rojo fuego y un follaje de un verde claro luminoso. 'Wildfire' demuestra una mayor resistencia a enfermedades que otros híbridos con colores similares. De crecimiento rápido y de dimensiones medianas, esta trepadora caduca es excelente para cubrir mallas, espalderas y pérgolas. Resistente en todas partes y fácil de cultivar, ¡mantenga sus raíces frescas y su cabeza al sol!

El cultivar 'Wildfire' es una clemátide híbrida obtenida por Szczepan Marczynski en Polonia en 1994. La clemátide es una trepadora caduca perteneciente a la familia de las Ranunculáceas. Esta Clematis, como la mayoría de sus primas, prefiere un suelo ligero, profundo, fresco y fértil, preferiblemente neutro. Aprecia una exposición soleada o parcialmente sombreada, con las raíces obligatoriamente a la sombra. Rústica en todas partes en Francia, resiste al frío y no teme las heladas, incluso intensas. Sin embargo, no le gusta la humedad estancada, por lo que el sustrato debe ser drenante y los riegos moderados (si son necesarios el primer año). Es adecuada para el cultivo en macetas si estas son, por supuesto, lo suficientemente grandes (mínimo 60 cm de diámetro).

La clemátide 'Wildfire' puede alcanzar hasta 3 m de altura con una envergadura de 2 m. Se trata de una clemátide del grupo 2, es decir, de grandes flores y floración primaveral, con remontes en otoño. Los tallos lignificados del año anterior llevarán las flores de primavera a veces dobles, mientras que los brotes herbáceos del año llevarán la segunda floración a finales de verano. Las flores, entonces simples en forma de estrella, generalmente están compuestas por 6 a 8 pétalos, superpuestos hasta la mitad de su longitud. Llevan un gran corazón, bien provisto de estambres erizados. Posteriormente, se transforman en frutos secos en acederas plumeantes persistentes en invierno, presentando un atractivo decorativo notable a finales de temporada. Las hojas, compuestas por 3 a 5 folíolos, son caducas y de un bonito verde medio. Son llevadas por pecíolos volubles llamados zarcillos que se enrollan alrededor de su soporte.

Plante bulbos de primavera y algunas plantas cubresuelos vivaces como geranios de flor blanca o azul a sus pies y ¡disfrute del espectáculo con un mantenimiento mínimo! Si tiene un espacio más grande, esta clemátide vigorosa se enroscará en arbustos o una columna y aportará verticalidad a un macizo de colores vivos. Las clemátides de grandes flores remontantes también son las mejores compañeras para sus rosales. Una ubicación soleada resaltará mejor su colorido oscuro que la media sombra. Hágala trepar sobre arbustos y setos de follaje verde claro o incluso dorado para resaltar todas las tonalidades de su floración.