Clematis armandii Apple Blossom - Clemátide de Armand

La clemátide 'Apple Blossom' es una bonita trepadora con follaje barnizado y persistente, de color verde oscuro. A finales de invierno, sus tallos vigorosos se cubren de cientos de pequeñas flores blancas rosadas, con reverso rosa más oscuro, y perfumadas. Es un deleite para los ojos y la nariz, en un período en el que el jardín es menos frecuentado. Un poco delicada, no le gustan las temperaturas inferiores a -10°C. Por lo tanto, es preferible darle una ubicación resguardada, soleada, en un suelo fresco pero drenado, y un soporte adecuado (espaldera, pérgola). También es una excelente planta para tu terraza, en una maceta lo suficientemente grande para evitar que el sustrato se seque.

La Clematis armandii 'Apple Blossom' es una planta de la familia de las Ranunculáceas, que incluye muchas ornamentales. Es así, aunque no lo parezca a simple vista, una prima de las delphiniums o... de las ranúnculas. Esta especie es originaria del sur de China, donde crece en los bosquecillos, en el borde del bosque, en claros boscosos y a lo largo de cursos de agua, hasta los 2400 m de altitud. Su follaje es muy característico entre las clemátides: los folíolos reunidos de a 3, alargados y puntiagudos (cada uno alcanzando unos diez cm) son coriáceos, de color verde oscuro y persistentes. El frío a menudo les da hermosos colores bronce púrpura. Como en la mayoría de las especies de clemátides trepadoras, los largos pecíolos se enrollan sobre sí mismos, y forman zarcillos que le permiten sujetarse firmemente a su soporte. Recibe su nombre del Padre Armand David, un misionero y botánico que recolectó numerosas especies en China en el siglo XIX.
Robusta, 'Apple Blossom' es capaz de cubrir rápidamente un soporte, y puede alcanzar los 3 a 5 metros de altura o de ancho. Desde finales de invierno, entre marzo y abril, la liana se cubre de una miríada de flores bastante pequeñas, con 4 sépalos blancos rosados, cuyo reverso está más marcadamente teñido de rosa. Además, las flores desprenden un discreto pero muy agradable aroma a almendra o flor de azahar. 

El cultivo de la clemátide Apple Blossom no es muy difícil: simplemente requiere un suelo drenado, fresco, bastante rico, ligeramente ácido a ligeramente calcáreo. Le gustan las exposiciones cálidas y soleadas, y una vez bien establecida, puede soportar episodios de sequía. Por otro lado, su rusticidad puede fallar en regiones con inviernos duros (-10°C): por lo tanto, evite las exposiciones ventosas, especialmente al norte. Si su clima no es propicio para el cultivo en terreno abierto, también da excelentes resultados en grandes recipientes suficientemente profundos. El único mantenimiento consiste en retirar las hojas muertas si son visibles, pero en general, pronto quedan cubiertas por las nuevas. Si desea podarla, hágalo justo después de la floración para no comprometer la del año siguiente. Sin embargo, esta operación es opcional.

Con su aspecto un poco exótico, la clemátide Apple Blossom es simplemente espectacular cuando puede expresar todo su potencial, por ejemplo, en una gran espaldera, una malla, o incluso en un seto de arbustos en los que viajará sujetándose a medida que avanza.