Clematis Kingfisher

La Clematis Kingfisher Evipo037 es una variedad de Clemátide reciente y florífera, seleccionada especialmente por su aptitud para el cultivo en macetas y por su pequeño desarrollo, bien adaptado a espacios reducidos. Con un porte compacto y robusto, esta bonita trepadora produce flores muy bellas de un azul-violáceo intenso iluminadas por un corazón de estambres blancos y estilos amarillos. Florece en primavera, y de nuevo a finales de verano, en casi toda su altura. Llamará la atención en la terraza, pero también en pleno suelo, en una valla, un pequeño árbol o una espaldera.

Las clemátides pertenecen a la familia de las ranunculáceas. Se encuentran en ambos hemisferios, especialmente en Europa, en el Himalaya, en China, en Australia, en América del Norte y Central. La variedad 'Kingfisher Evipo037', obtenida en 2007 en Inglaterra, es una planta perfectamente vivaz y rústica, semileñosa y trepadora, que alcanza una altura promedio de 2 m, con una extensión aproximadamente equivalente. Pertenece al grupo de las clemátides patens, de grandes flores simples.

Esta clemátide produce flores de 10 a 15 cm de diámetro que aparecen en la madera del año anterior en primavera, en mayo-junio, y una segunda vez en los brotes del año, en septiembre. Las flores son solitarias o agrupadas en cimas y abundantes. Son erectas y presentan una amplia corola compuesta por 6 a 8 tépalos que se superponen. Son ligeramente ondulados en el borde, teñidos de violeta-azul con una zona mediana de un violeta más oscuro en la parte superior, siendo la parte inferior de color violeta-azulado atravesada por una línea central de un violeta-azul más claro mezclado con blanco. El centro de la corola está ocupado por un ramillete de estambres de color blanco-crema y pistilos amarillos. La floración es seguida de frutos decorativos plumosos gris plateado que perduran hasta el invierno. Las hojas, caducas, son a veces simples, a veces alternas y divididas en 3 folíolos redondeados. Tienen un promedio de 10 cm, son glabras y de un verde medio. Esta clemátide se sujeta al soporte o a la planta anfitriona mediante pecíolos transformados en zarcillos.

'Kingfisher', con su generosa floración, vigor y pequeño desarrollo, es perfecta en una maceta grande en la terraza donde vivirá muchos años. Plante sus clemátides acompañadas de sus rosales trepadores o lianas para prolongar la floración de sus muros y pérgolas hasta finales del verano. Es un género rico en diversidad, existen de todos los colores, formas y tamaños. Aproveche su facilidad de cultivo para dar a su jardín un aire romántico y bohemio. También les encanta trepar en los arbustos, se mezclan bien con flores blancas, rojas o rosas: no dude en combinar varias variedades con floraciones simultáneas o escalonadas. Las flores azules de 'Kingfisher' se realzan con el follaje otoñal, y son absolutamente magníficas en las grandes hojas escarlatas a granate de lavid roja, o en los colores flamígeros que adquiere el árbol peluca a partir de mediados de septiembre.

Consejos: Evite el exceso de fertilizante que estimula el follaje en detrimento de las flores. No acolche para evitar una humedad importante que favorece la enfermedad del marchitamiento.