Akebia longeracemosa - Akebi

El Akebia longeracemosa, también conocido como akebia de largos racimos, es una planta trepadora voluble de gran originalidad. En esta especie taiwanesa muy rara en cultivo, los racimos de flores colgantes miden aproximadamente 15 cm de longitud. Florecen en primavera, de mayo a julio: de un color púrpura chocolate completamente exquisito, no dejarán de maravillar con su apariencia exótica y su delicioso perfume a vainilla. El foliaje semi-persistente también es muy ornamental, destacando un diseño ligero y gracioso. Esta akebia muy resistente aprecia los suelos frescos pero drenados, fértiles, y una exposición soleada. 

Esta bonita planta voluble de tallos leñosos, originaria de bosques y laderas montañosas de Asia subtropical y templada, pertenece a la familia de las lardizabaláceas. Alcanzará rápidamente una altura de 3 a 5 m con una envergadura de 2 m, a veces más si las condiciones de cultivo le son favorables. El Akebia longeracemosa lleva, de mayo a junio e incluso julio, hermosos racimos colgantes, adornados con flores en forma de campanillas, de aproximadamente 15 cm de longitud, de color púrpura oscuro. Planta monoica, lleva en los racimos tanto flores masculinas como femeninas en el mismo pie: siendo las flores femeninas más grandes. Esta floración, muy nectarífera, exhala un aroma a vainilla. Sin embargo, la planta no es autofértil y requiere la presencia cercana de un segundo pie para producir frutos. Los frutos aparecen durante un verano cálido. Tienen forma de grandes judías hinchadas y arqueadas, de color púrpura, de aproximadamente 6 cm de longitud por 2 cm de ancho. Aunque comestibles, tienen una pulpa blanca poco sabrosa que rodea grandes semillas negras. El foliaje semi-persistente o caduco según el clima, es muy ornamental. Está compuesto por 5 foliolos verdes oblongos, florece en primavera, al final de la floración y adquiere tonos rojizos en otoño.

Con su aspecto exótico, el Akebia longeracemosa es una trepadora de excelente rusticidad, soportando heladas de alrededor de -13°C hasta -18°C en ejemplares adultos. Se sujeta a su soporte con sus tallos volubles provistos de zarcillos, y puede ser instalada en una pérgola, una pared o en un árbol junto a un rosal trepador o un madreselva persistente, preferiblemente en una ubicación resguardada y soleada.