Hiedra de Persia Arborescens

El Hedera colchica Arborescens es ahora conocido como 'Fall Favorite' para evitar cualquier confusión con la Hiedra común en árbol (Hedera helix Arborescens). Se trata de una variedad de Hiedra de Persia no trepadora, que crece lentamente para formar un pequeño arbusto muy tupido, elegante y decorativo durante todo el año. Tiene largas hojas de un verde oscuro lustroso y florece a principios de otoño, en umbelas de pequeñas flores blancas-amarillentas melíferas y nectaríferas que darán paso a pequeñas bayas negras buscadas por los pájaros. Ornamental durante todo el año, muy resistente, esta variedad es maravillosa en macizos, como cubresuelos o para ocultar el pie desnudo de arbustos, por ejemplo. Su cultivo no presenta ninguna dificultad en tierra ordinaria pero drenada, y se adapta a todas las exposiciones.

Las hiedras pertenecen a la familia de las araliáceas, son primos de los fatsias. La Hiedra de Persia es originaria del Próximo y Medio Oriente, desde la costa turca del Mar Negro hasta Asia Menor (Afganistán, Golfo Pérsico, algunas islas del Mar Rojo). Se encuentra en zonas boscosas con microclimas húmedos, donde las nieblas son frecuentes, como en las proximidades de cursos de agua. Esta planta trepadora de crecimiento bastante lento puede alcanzar los 30 metros de altura en la naturaleza, escalando acantilados y grandes árboles. Si no encuentra soporte vertical, se extenderá por el suelo. Esta planta se sujeta a su soporte mediante raíces aéreas transformadas en pequeños crampones. Hay ejemplares de más de 400 años de edad.

'Fall Favorite' proviene de una Hiedra de Persia adulta: se obtiene mediante esquejes de los tallos floríferos que se desarrollan de forma natural en la parte superior de las plantas en edad de florecer. Estos tallos, muy específicos, tienen la particularidad de crecer muy lentamente, ser poco trepadores y a menudo carecer de sistema de sujeción. Esta variedad se desarrollará entonces en un arbusto extendido, densificándose y esparciéndose por el suelo. En su madurez, la planta medirá aproximadamente 1.50 m en todas direcciones. Sus ramas flexibles se lignifican con la edad. Llevan, durante todo el año, hojas lustrosas, dispuestas de forma opuesta, de aproximadamente 8-10 cm de largo. Son coriáceas, ovaladas alargadas, puntiagudas en su extremo y ligeramente onduladas. De un verde claro y brillante cuando son jóvenes, se oscurecen gradualmente hasta el verde muy oscuro. Son más pequeñas y muy alargadas. La floración ocurre en septiembre-octubre según el clima, será más abundante al sol o en semisombra. Las flores, de color amarillo verdoso, son discretas, pero están agrupadas en grandes umbelas globulosas y fragantes. Son muy ricas en néctar y alimentan a numerosos insectos y pequeños animales. Después de la polinización, las flores producen pequeñas bayas negras que son del agrado de los pájaros. Ellos son quienes dispersan las semillas alrededor.

El Hedera colchica Arborescens, perfectamente resistente, se adapta absolutamente en todas partes, excepto en exposiciones calurosas, áridas o demasiado secas. Es valioso para aportar un poco de exuberancia y fantasía a las zonas poco gratas del jardín, despreciadas por la mayoría de las otras plantas. Forma un buen cubresuelos y es un elegante complemento para todos los arbustos que lo acompañan (rosales, bojes, sarcococcas, perales...). También es perfecto para decorar una terraza o un balcón, plantado en una maceta grande desde la que caerá en verdes cortinas hasta el suelo. Combínalo con vivaces de sotobosque fáciles de cultivar como epimediums, jacintos de bosque, anémonas japonesas, bruneras, pulmonarias, geranios vivaces macrorrhizum o phaeum, por ejemplo.