Luzula sylvatica - Lúzula del bosque

La Luzula sylvatica, también conocida como Lúzula del bosque, es una pequeña gramínea cubresuelos con hojas anchas persistentes, bordeadas de seda, de un verde claro y brillante muy luminoso en las zonas sombrías del jardín. Florece en primavera, en forma de panículas ligeras que llevan pequeñas espigas marronáceas. Es una excelente vivácea para la sombra seca o húmeda, perfecta para adornar la base de los arbustos caducos.

La Luzula sylvatica es una planta herbácea vivaz con una gruesa raíz débilmente rastrera, perteneciente a la familia de las juncáceas, al igual que las juncias comunes en lugares húmedos. A diferencia de ellas, la lúzula acepta muy bien condiciones más secas, y su follaje está compuesto por hojas lineales y ensanchadas, no cilíndricas. La lúzula del bosque, originaria de Europa central y meridional, pero también de Asia Menor y el Cáucaso, es una planta muy extendida en nuestros bosques y sotobosques franceses. Esta planta forma un denso manojo, en forma de un gran cojín, alcanzando 30 a 40 cm de altura y ampliándose con el tiempo. Las hojas, persistentes, dispuestas en largas tiras anchas de 6 a 12 mm, son flexibles y presentan un verde intenso, vivo y brillante. Las pequeñas flores marrones aparecen en abril-mayo, reunidas en panículas ligeras ramificadas en finos tallos.

Amante del ambiente sombrío de los bosques de hoja caduca, la Luzula sylvatica es una excelente planta de sombra muy resistente. Como su nombre indica, crece muy bien bajo árboles o arbustos caducos, en sombra ocasionalmente seca, o en suelo humífero. Plántela en taludes o en los bordillos, en compañía de epimediums, de pervinca (Vinca), de geranios macrorrizos o de heucheras. También se cultiva muy bien en macetas y permite adornar la base de los arbustos cultivados en grandes macetas como los camelios o los hibiscos.