Miscanthus sinensis Kaskade

El  Miscanthus sinensis 'Kaskade' es una nueva variedad de Eulalia llamada así por el aspecto bellamente 'cascante' de su maravillosa floración, bastante temprana para un Miscanthus. Este carrizo de China, de bella estatura, con sus inflorescencias un poco sueltas y colgantes que van del rosa nacarado al blanco, no carece ni de encanto ni de elegancia en los grandes macizos o en una decoración contemporánea. Florecen desde el mes de agosto, coronando un mechón de largas hojas verdes que además adquieren bonitos tonos cobrizos al final de la temporada. 'Kaskade' aporta ligereza y poesía al jardín, incluso durante el invierno que no altera su hermosa silueta. Esta gramínea ornamental es fácil de cultivar al sol, en cualquier suelo no demasiado seco.

El carrizo de China 'Kaskade', seleccionado en Alemania por Ernst Pagel, pertenece a la familia de las poáceas. Es una de las numerosas formas hortícolas derivadas de Miscanthus sinensis, originaria del Extremo Oriente Asiático y Oceanía. Esta  gramínea vivaz con rizomas cortos se desarrolla en un mechón no invasivo, es cespitosa y no invasiva. De porte a la vez flexible y erguido, esta variedad Kaskade alcanza aproximadamente 1,60m a 1,80 m en flor, con una extensión de 60 a 70 cm. Las hojas son anchas de 10 a 12 mm, muy largas, flexibles, de color verde hasta finales de verano, atravesadas por una nervadura de color pálido. Se colorean más o menos de tonos cobrizos en octubre-noviembre, antes de secarse en invierno. De entre el follaje emergen largos tallos florales en la segunda mitad del verano, en forma de largas espigas digitadas y sedosas, curvadas, de color rosa pálido al brotar. Al marchitarse, adquieren un bonito tono blanco nacarado, muy luminoso. Los penachos están formados por diminutas flores rosas que se cierran un poco después, para abrirse de nuevo al madurar. Entonces adquieren un aspecto más pálido y más sedoso.

Esta Eulalia muestra un follaje caduco, pero que permanece interesante gran parte del invierno. Es una "hierba" hecha para el fondo de los grandes macizos a los que su fuerte presencia aporta una bella estructura y mucha gracia. Es adecuada para jardines silvestres y para jardineros contemplativos. Solo hay que instalarla entre los grandes ásteres, en compañía de los girasoles vivaces o de las verbenas de Buenos Aires, observarla crecer y desarrollarse, jugar con el viento y la luz rasante del otoño, y doblarse bajo las lluvias. También tiene su lugar en los jardines modernos, de líneas depuradas, en compañía de los bambúes enanos por ejemplo. Estas gramíneas aportan volumen y textura a los macizos de vivaces, aligerando sus floraciones. En una decoración urbana, el Miscanthus 'Kaskade' suavizará las estructuras de hormigón. El cultivo en grandes macetas también es muy adecuado, permitiendo amueblar la terraza o el balcón con mucha elegancia y sobriedad.