Pennisetum incomptum

El Pennisetum incomptum es una robusta gramínea vivaz, muy resistente, tolerante con respecto al suelo, la salinidad y la sequía. Ideal para espacios grandes un poco salvajes, sin embargo, es fácil de contener en una maceta grande. Esta especie conquistadora forma un gran mechón de porte erguido, un poco difuso, de color verde-gris, atractivo desde principios de verano debido a su floración temprana. Sus largas espigas temblorosas dominan la masa en movimiento del follaje, como finos penachos evolucionando de verde plateado a beige a marrón claro al final de la temporada. Esta especie tiene un sistema radicular rastrero que es necesario controlar. Muy fácil de cultivar y poco exigente, es una planta ideal para grandes parterres soleados, incluso en suelos pobres o ocasionalmente secos en verano.

El Pennisetum incomptum es una gramínea originaria del norte de China y pertenece a la gran familia de las poáceas. Esta hierba con espigas se desarrolla a partir de una potente raíz rizomatosa. En plena madurez y floración, formará matas altas de más de un metro, expandiéndose sin límite teórico con los años. A diferencia de otros Pennisetum, esta especie tiene un porte más bien erguido. El mechón basal está compuesto por largas hojas muy finas de color verde un poco glauco, más o menos grisáceo. Los tallos florales emergen de la vegetación en junio-julio, llevando inflorescencias erguidas, compuestas por espiguillas muy sedosas, reunidas en delgados racimos, de 20 a 25 cm de longitud. Su color evoluciona de verde plateado a beige-marrón en septiembre-octubre. El follaje se vuelve amarillo paja en otoño. La planta sigue siendo decorativa gran parte del invierno cubriendo con escarcha los vestigios de su vegetación.

Esta vigorosa gramínea aporta una verdadera solución para la planificación de áreas complicadas, para retener un talud seco, garantizar la decoración de un espacio urbano, un parterre de estilo contemporáneo, o contener a las invasoras que amenazan con invadir un jardín salvaje. Requiere para expresar todas sus cualidades espacio y mucho sol, aceptando muy bien las zonas azotadas por el viento y los climas marítimos. Se podría asociar con otras grandes gramíneas como las Eulalia o la pampa, así como con arbustos y vivaces vigorosos como los perovskias, los escobones, los girasoles vivaces o grandes cardos. Las gramíneas aportan una flexibilidad adicional a cualquier paisaje, sin eclipsar la belleza de sus compañeras. Los Pennisetum permiten dar movimiento a los parterres, estratégicamente colocados entre las piedras de una rocalla o en un muro. No se prive tampoco de su sentido del tacto: sus espigas son tan sedosas al tacto como parecen.