Dryopteris erythrosora - Helecho macho de sori rojos

La Dryopteris erythrosora es uno de los helechos de frondas persistentes más resistentes y ornamentales. Sus hojas plumosas cambian de color con el tiempo, creando en la sombra de los sotobosques una decoración permanente de gran poesía. Sostenidas por pecíolos rojizos de un hermoso color cobrizo en la madurez, sus frondas son casi rosadas al nacer. Instálela en sotobosques, o en una zona del jardín semisombreada, e incluso a la sombra. Fácil de cultivar en suelos húmicos y frescos, su cultivo está al alcance de todos los jardineros.

El Dryoptéris erythrosora forma parte de un amplio grupo de plantas llamadas helechos dryoptéris, que son todas especies terrestres caducas o semipersistentes, pertenecientes a la familia de las Dryopteridáceas. Originaria del este asiático, China, Corea y Japón, esta especie botánica se encuentra en laderas y pendientes boscosas de montañas, en regiones frescas y húmedas de clima templado.

La planta, establecida en un rizoma corto, rastrero y a menudo ramificado, forma un mechón erguido de grandes frondas de aproximadamente 70cm de altura por 40cm de ancho. Sus prefoliaciones se despliegan en primavera en jóvenes frondas de un rosa pálido que cambian gradualmente a naranja cobrizo y rojo, para finalmente volverse verdes brillantes en invierno. Tienen forma triangular, bipinnadas, compuestas de pínnulas con bordes dentados que ofrecen una arquitectura muy hermosa. El foliaje persistente se regenera en primavera, de hecho se recomienda cortar las antiguas frondas dañadas por el frío hacia finales de marzo o principios de abril para disfrutar del nacimiento de las nuevas frondas. Su nombre de especie, erythrosora, significa "soros rojos": de hecho, se pueden observar en el envés de las frondes maduras pequeñas 'pastillas' de color rojo dispuestas en dos filas paralelas a ambos lados del raquis, es decir, de la vena principal: estos son los soros, los "frutos" de los helechos. En la madurez, los soros liberan las esporas que serán dispersadas por el viento.

Auténtica perenne de sombra o semisombra, esta vigorosa Dryopteris puede sin embargo tolerar una sequía pasajera, común bajo la cubierta de los grandes árboles en verano, incluso en climas húmedos. Se puede asociar con la Soleirolia, los eucomis, hostas, hortensias y Fuscias arbustivas, heucheras chocolate o caramelo, siempre en luz tamizada o a la sombra. En una pequeña escena exótica, asociada por ejemplo con el Fatsia japonica, no pasa desapercibida. Sus bonitas plumas surgirán de la sombra en un rincón un poco descuidado de la terraza, si se instala en una maceta muy grande llena de tierra fértil.

La hermosa coloración de las frondas en primavera y otoño le ha valido a este helecho sus nombres vernáculos de 'Helecho escudo cobrizo', 'Dryopteris de frondas cobrizas' o 'Helecho de otoño'.