Manzanilla romana Ligulosum - Chamaemelum nobile

La Manzanilla romana, también conocida como Chamaemelum nobile 'Ligulosum' se utiliza en los jardines por sus bonitas flores blancas con corazón amarillo y sus numerosas propiedades terapéuticas. Planta de cultivo fácil, es imprescindible en los jardines de plantas aromáticas o en rocallas.

Esta vivácea de porte tapisante de 15-20 cm de altura es muy resistente, desarrolla un follaje perenne, velloso, de color verde grisáceo y flores blancas con corazón amarillo de 2 cm de diámetro. ¡Es un excelente cubresuelos perfumado!

Planta mediterránea, la Manzanilla romana aprecia un suelo ligero, pobre, seco, arenoso en situación soleada. En suelos pesados, añada arena de río. Realice una aportación de compost en la plantación. El único mantenimiento necesario es un riego tres veces por semana en verano durante las fuertes calores. La cultura en maceta es posible pero requiere un riego regular.

Las flores de la Manzanilla se recolectan preferiblemente por la mañana. Infusione durante 5 minutos una cucharada de flores secas por 200 ml de agua hirviendo y endulce con miel para quitar la amargura. Esta infusión ayuda a conciliar el sueño (propiedades calmantes) pero también es tónica, antiespasmódica, digestiva y analgésica.

En el huerto : La Manzanilla romana atrae a numerosos auxiliares como los crisópidos o los escarabajos sírfidos pero no es una buena compañera para las lechugas. Sin embargo, la aspersión de su infusión reduce el damping-off de las siembras.

En el jardín, utilícela como pequeño cubresuelos en rocallas o en bordillos de macizos de vivaces al pie de lavandas, santolinas, tomillos.