Veratrum nigrum

El Veratrum nigrum, también conocido como Vara negra o falso eléboro, es una planta sorprendente y rara, originaria de las montañas del Sur de Europa y Asia. Esta majestuosa vivaz tiene hojas ovales y plisadas que recuerdan a las de los hostas, mientras que su floración estival en alta candela oscura y ramificada imita un poco a la de las verbascos o las ruibarbos. Sus pequeñas flores estrelladas son muy oscuras, de un marrón-púrpura violáceo, casi negras según la luz. Simplemente hermosa, también es perfectamente rústica, muy resistente y de cultivo bastante fácil en suelo humífero y fresco, a media sombra o en sol tenue.

El Veratrum nigrum pertenece a la familia de las melantáceas, es primo de los trilliums, por ejemplo. En Francia, esta especie salvaje rara está protegida; se encuentra únicamente en los Alpes de Alta Provenza y en el Alto Rin. La vara negra es una planta herbácea muy perenne que forma una fuerte base anclada en un rizoma subterráneo. La planta alcanzará fácilmente 1,40 m en flor, e incluso más en suelo fértil, pero su crecimiento es lento; el tamaño definitivo se alcanzará después de 25 años de cultivo. Produce en primavera una roseta basal de grandes hojas ovales y enteras, que pueden alcanzar los 30 cm de longitud. Son de color verde claro, ligeramente brillantes y presentan venas paralelas muy marcadas. La floración tiene lugar en verano, de junio a agosto según el clima, y dura aproximadamente un mes. Robustos tallos florales con hojas envainantes emergen de la roseta, produciendo grandes panículas ramificadas compuestas por flores estrelladas de 6 pétalos muy oscuras, en una mezcla de rojo, marrón y violeta. Están apretadas unas contra otras y curiosamente perfumadas. Toda la planta contiene alcaloides tóxicos en sus tejidos.

Planta de alta montaña y espacios libres y frescos, la vara negra es una vivaz muy duradera y realmente original. Los escenarios naturales en las zonas un poco salvajes del jardín se verán transformados por su presencia. Tolera bien la sombra ligera y su floración parecerá más larga y colorida, se puede aprovechar para combinarla con plantas de sombra como el Actaea simplex Brunette, o las tiarellas. Las plantas de follaje más claro resaltarán su floración, al igual que la Acanthus Whitewater o el Phalaris Picta. En un jardín de montaña, se puede asociar con acónitos y digitales púrpuras. Acompáñelo con la fraxinela, la achicoria salvaje, o el maravilloso hinojo morado. El cultivo en macetas es posible, pero se necesitará una maceta muy grande ya que sus raíces necesitan espacio.