Anaphalis alpicola - Perlas nacaradas

La Anaphalis alpicola es una planta vivácea fácil de cultivar, que vive naturalmente en un suelo seco y pobre. Conocida también como Campanilla de plata de los Alpes, sus pequeñas flores blancas están reunidas, durante el verano, en pequeños racimos en la cima de tallos cortos erguidos que forman un cojín bajo de follaje gris lanoso. Con una vida muy larga, las flores, ásperas al tacto, constituyen magníficos ramos secos.

Con una excelente capacidad de adaptación, la Anaphalis alpicola crece al sol y acepta cualquier tipo de suelo siempre que no esté demasiado húmedo. Ideal en Rocalla o en una maceta, crece junto a pequeños sedums, o asociada con Campanillas poscharskyana y Iberis en una ladera rocosa. Toleran la sombra, pero pierden entonces su elegante porte compacto.