Aubrieta canescens ssp. cilicica

La Aubrieta canescens ssp. cilicica es una aubrieta silvestre originaria de las altas montañas de Turquía. Se trata de una especie rara en cultivo, diferente de nuestras aubrietes híbridas, particularmente bien adaptada a los suelos secos y los inviernos fríos. Esta pequeña vivaz forma un cojín compacto y ofrece a finales de primavera innumerables flores azul violáceo, que parecen estar sobre un tapiz de pequeñas hojas gris verdosas. Esta pequeña vivaz de suelo seco se extenderá en un cojín muy bajo en una rocalla o adornará la parte superior de un muro de piedras secas. Un tesoro para los jardines de montaña y los jardines sin riego, para cultivar a pleno sol en la rocalla o encima de un muro.

La Aubrieta canescens también se conoce con los nombres de Aubrieta deltoidea var. canescens, Aubrieta canescens subsp. macrostyla y Aubrieta canescens subsp. canescens, probablemente debido al color muy claro de su follaje cubierto de una pelusa protectora. Pertenece a la familia de las brassicáceas, al igual que las coles, la colza y la mostaza india. Es originaria de Cilicia, una provincia unida al territorio turco. El hábitat de esta pequeña vivaz corresponde a las rocas y a los escombros calizos de montaña, a una altitud comprendida entre 1000 y 2500m. Esta subespecie, particularmente compacta, forma un cojín muy denso de 10 a 15 cm de altura en flor y 20 cm de diámetro aproximadamente, extendiéndose con el tiempo. Los tallos, rastreros, llevan pequeñas hojas ovales, peludas, dentadas, que se asemejan a las de las canastillas de plata. La floración tiene lugar en abril-mayo, según el clima. Tallos grises emergen del follaje, llevando cada uno una pequeña flor de 1 a 2 cm de ancho, de un azul violáceo luminoso con garganta amarilla.

Ideal en rocallas secas, muros, bordes de macizos sobre grava y pavimentos, esta aubrieta ama las exposiciones soleadas y requiere un suelo muy drenado. Se puede asociar en este uso con otras pequeñas vivaces tapizantes como la campanilla de los muros, gypsophila rastrera, Cerastium tomentosa, Alyssum saxatile o la Artemisia Schmidtiana. También se puede cultivar en una alpina, con otras pequeñas vivaces de suelo calizo como por ejemplo la Arabis caucasica, la Erigeron compositus, o la Penstemon glaber alpinus.