Campanula portenschlagiana

La Campanula portenschlagiana, también conocida como campanilla de muros o Campanula muralis, es una planta vivaz rastrera que forma hermosas alfombras de color azul violáceo intenso, floreciendo abundantemente en primavera y hasta principios de verano, a veces nuevamente en septiembre. Reconocida por su robustez y gran capacidad de adaptación, es un clásico en los jardines. Este maravilloso cubresuelos, muy florífero, merece un lugar destacado en la rocalla, sobre un murete o en una jardinera desde donde caerá alegremente.

La Campanula porscharskyana pertenece a la familia de las campanuláceas. Es una pequeña planta vivaz muy rústica, originaria de las montañas de los Balcanes. En la naturaleza, se encuentra en grietas de rocas y pedregales de alta montaña. La planta forma más o menos rápidamente un cojín de 20 cm de altura, con una extensión mínima de 60 cm. Se extiende mediante tallos que enraízan al contacto con el suelo, permitiéndole ocupar cada vez más espacio. La floración comienza a finales de primavera y continúa durante el verano, de manera más abundante en climas frescos. Es más común que tenga un descanso en verano, cuando hace calor y seco. Luego se produce un nuevo florecimiento en otoño. Las flores, en forma de estrella, miden de 2 a 2,5 cm de diámetro, y se disponen en panículas sueltas a lo largo de tallos pubescentes. La foliación, semipersistente a persistente según el clima, está compuesta por hojas pequeñas de color verde intenso, vellosas, con pecíolos largos, cordiformes, dentadas en el borde.

La campanilla de muros es una planta de montaña que no tolera climas demasiado cálidos, ni la aridez, ni las noches calurosas. Prospera en suelos ligeros, no demasiado secos, pero teme la humedad estancada que pudre las raíces. No es difícil proporcionarle tales condiciones en una rocalla soleada o semisombreada. Rápidamente llenará las grietas en el pavimento, cubrirá los viejos muros y muretes. Plantada en línea, formará adorables bordillos, muy regulares. También es adecuada tanto para un jardín silvestre como para la plantación en macetas, en un sustrato ligero y perfectamente drenado. También se puede colocar al pie de rosales, arbustos caducos o setos. En cestas colgantes, se desbordará en pequeñas cortinas luminosas: por ejemplo, combínela con un Díascea rosa, una euforbia anual de flores blancas Diamond Frost o un Coreopsis amarillo limón.