Chrysanthemum indicum Cedie Mason - Crisantemo

El  Chrysanthemum (x) indicum 'Cedie Mason', más conocido como Crisantemo de jardín, es un verdadero himno al otoño. Es una variedad que ofrece una intensa floración otoñal de margaritas burdeos, realzadas por un corazón abombado amarillo brillante ¡desde septiembre! Este crisantemo de jardín es una planta perenne arbustiva que forma un mata densa y redondeada de 1 m de altura, perfecta para aportar calor al jardín hasta la llegada del invierno. A diferencia de sus primos de cementerio, es una planta resistente que se cultiva sin problemas en terreno abierto en un suelo normal, no demasiado pesado, drenado y que se mantiene fresco en verano. Plantada en macizo delante de un bosque caduco, disfruta de recuperar la luz a través de las copas cada vez más claras, recordando los tonos flamígeros de los follajes otoñales.

El Crisantemo de jardín 'Cedie Mason' pertenece a la familia de las Asteraceae, es un pariente de las margaritas y los girasoles. Es un cultivar derivado de Chrysanthemum indicum, una planta nativa del este de Asia, cultivada desde la Antigüedad en China, Japón y Corea, que es la origen de los crisantemos de los floristas.

Esta variedad 'Cedie Mason' forma rápidamente una mata de porte redondeado, compuesta de tallos leñosos en la base, frondosos y ramificados, de aproximadamente 1 m de alto por 50 cm de ancho. La floración se extiende de septiembre a noviembre según el clima, y se prolonga durante varias semanas. La planta se cubre de numerosas flores en forma de margaritas semi-dobles, burdeos y con centro amarillo puro. Las flores son en realidad capítulos de 3-4 cm de diámetro, reunidos en racimos llamados corimbos en la extremidad de los tallos ramificados. Las hojas son llevadas por un pecíolo de 1 a 2 cm de largo. La lámina es oval a elíptica oval, midiendo de 3 a 7 cm de longitud por 4 cm de ancho, pubescente (pelusa), pennada, más o menos lobulada, con base truncada. El sistema radicular de esta planta es un rizoma superficial. Su parte aérea se seca en invierno y vuelve a brotar en primavera.

Los crisantemos de jardín ofrecen inmensos recursos en una época del año un poco menos florida y combinan de manera notable con los colores de otoño. Se pueden asociar con los ásteres, en colores complementarios. Sus floraciones se aligerarán con las de cosmos, anémonas del Japón, gauras, salvias arbustivas, fucsias magellanica, lirios de río... Son particularmente interesantes cuando se asocian con gramíneas: Carex, Stipa y Pennisetum. El crisantemo resulta ser una buena flor cortada, muy duradera en un jarrón. Piense en utilizar las variedades más altas para formar macizos de otoño al pie de los arbustos caducos que reflejarán su follaje otoñal amarillo, rojo y naranja.

Las partes aéreas de Chrysanthemum indicum (flores, hojas y tallos) forman parte de la farmacopea china. Se utilizan en medicina tradicional para el tratamiento de vértigos, síntomas de hipertensión y varias enfermedades infecciosas.