Filipendula ulmaria Plena

La  Reina de los prados Filipendula ulmaria 'Plena' es la forma de flores dobles de la reina de los prados, esta hermosa planta silvestre europea que encontramos en lugares húmedos y soleados de nuestras zonas rurales. Aún más brillante y vaporosa, sus penachos blancos puros y etéreos, llamados corimbos, atraen a una gran cantidad de insectos libadores de junio a agosto. Ideal para terrenos húmedos y alrededor de puntos de agua, es a la vez muy elegante, resistente y rústica, adecuada para diferentes tipos de jardines y no requiere ningún tipo de mantenimiento.

La reina de los prados es una planta de la familia de las rosáceas, al igual que las espiras y las potentillas. Esta planta eurasiática está vinculada a lugares húmedos como el borde de arroyos o zanjas, en espacios abiertos y soleados. Esta planta es conocida desde hace siglos por sus numerosas virtudes. En primer lugar, aromáticas: perfuma vinos, cervezas y hidromiel. Pero también medicinales: se utiliza como analgésico, antiinflamatorio, diurético... En nuestros jardines, es principalmente decorativa, y su forma de flores dobles lo es aún más. La Filipendula ulmaria 'Plena' forma un mechón erguido alto de 1 m y ancho de 60 cm. De su tocón rizomatoso arrancan largos tallos ramificados, que llevan grandes hojas brillantes de un verde intenso. Estas son imparipinnadas, es decir, compuestas por un número impar de folíolos, claramente dentados y pinnados, cuya superficie acanalada refleja agradablemente la luz. En el extremo de los tallos, corimbos etéreos oscilan al viento. Están formados por múltiples flores blancas y dobles, ligeramente perfumadas.

La Reina de los prados Filipendula ulmaria 'Plena' es una vivaz de gran tamaño que permite componer un fondo verde, aéreo y salvaje. Resiste al frío y aprecia tanto las exposiciones soleadas como la media sombra. Su única exigencia es estar plantada en un suelo siempre fresco a húmedo. Encuentra su lugar en todos los macizos, detrás de las pequeñas plantas rechonchas, como los Geranios vivaces y Heucheras, y entre las grandes esbeltas, como Aconitums, consueldas y otras Barbas de cabra. También se puede asociar con variedades rosas como la Filipendula 'Rubra Venusta', astilbes púrpuras o verónicas en espigas violetas que también aprecian los suelos húmedos.