Hosta Diamond Lake

El Hosta Diamond Lake es una variedad "azul" poco común y de gran valor ornamental. Es una planta vigorosa que desarrolla una vegetación exuberante compuesta por grandes hojas en forma de corazón cubiertas de una cera azul, especialmente gofradas y onduladas, recordando un poco a las hojas de un col rizado. Son lo suficientemente gruesas para disuadir a las babosas. De la vegetación emergen en verano espigas de flores lavanda. Esta magnífica vivaz causará sensación en el borde del sotobosque, en un macizo contemporáneo o japonés, y por supuesto en una maceta muy grande en una terraza sombreada.

Este Hosta, o Funkia Diamond Lake es una vivaz completamente resistente de la familia de las liliáceas o de las hostáceas según las clasificaciones. Es un híbrido derivado de los Hosta 'Niagara Falls', H. 'Neptune' y H. 'Fulda'. La planta muestra, a partir de la primavera, un porte en matas anchas. Adulta en 5 o 6 años, alcanzará 55 cm de altura y puede extenderse a más de 1 m, si se dan las condiciones adecuadas. Es una variedad de buena longevidad, cuyas hojas en forma de corazón pueden medir hasta 26 cm de longitud por 22 cm de ancho. El limbo es muy grueso, muy gofrado, con un borde muy ondulado. La floración generalmente ocurre en julio-agosto, en forma de campanitas alargadas de color malva, agrupadas hacia la parte superior de pedúnculos que emergen ampliamente del follaje. Toda la vegetación aérea, caduca, desaparece en invierno.

Tradicionalmente se planta el hosta bajo árboles caducos, en macizos frescos o en rocallas y bordillos, y especialmente en los alrededores de puntos de agua. Es una vivaz que se puede cultivar muy bien en macetas e incluso en lugares aislados. El Hosta Diamond Lake se combina bien con helechos, tiarellas y astilbes, por ejemplo, estas plantas aprecian los mismos ambientes. Para resaltar su extraordinario follaje, combínelo con falsas gramíneas de color amarillo a dorado preferiblemente, especialmente con Carex y Hakonechloa. También tenga en cuenta los bulbos de primavera, los nomeolvides siberianos y los ajugas rastreros para hacerle compañía.