Iris germanica Rosalie Figge

El Lirio azul 'Rosalie Figge' es una variedad de gran iris de jardín con fiabilidad en su capacidad de remontar, que ofrece flores bellamente formadas con un color violeta-púrpura destacado por la textura muy aterciopelada de los sépalos. El color casi uniforme de la flor está ligeramente tigrado de blanco alrededor de la barba blanca puntada de violeta, amarillo en la garganta. Esta planta, a la vez suntuosa y eficiente en el jardín, ha sido premiada tanto en los EE.UU como en Inglaterra por la Real Sociedad de Horticultura.

El Lirio 'Rosalie Figge' es una planta perenne rizomatosa y caduca, con un porte en mata erguido. Pertenece a la familia de las Iridáceas. Es uno de los muchos cultivares obtenidos a lo largo de los siglos, cuyo origen controvertido se discute en torno al número de cromosomas de los ancestros potenciales. Recordemos que los Iris de jardín tienen orígenes europeos. 'Rosalie Figge' es una variedad alta, que alcanzará 1 m de altura en flor, con un tallo por rizoma, llevando varios botes florales. La mata se extenderá muy rápidamente, sin límite teórico con el tiempo, los rizomas del centro adelgazándose en favor de los rizomas externos. El follaje está formado por largas hojas en forma de sable, verde glauco y muy acanaladas. En abril aparecen tallos florales que darán en mayo flores que se abren desde la parte superior hacia las ramificaciones más bajas. La floración se remonta a finales de verano, de manera regular, poco influenciada por las condiciones de cultivo o meteorológicas. El color potente y profundo de esta planta es, como siempre en los Iris de jardín, magnificado por la textura de los pétalos sedosos y de los sépalos, muy aterciopelados en esta variedad. Cabe destacar que las flores también son agradablemente perfumadas. Los iris remontantes son aún más prolíficos que las variedades clásicas: requieren ser divididos y replantados más regularmente. También son plantas más exigentes.

Obtenido por Jane McKnew, 1991. (Gloria de Titán x Milagro Violeta)

Para acompañar a los iris, se elegirán plantas para asociar según sus necesidades (exposición, suelo...), su vegetación no asfixiante para sus rizomas (plantas bajas o follaje ligero) y su complementariedad (aspecto, fecha de floración). Por ejemplo, las Gauras no darán sombra a los iris y mantendrán un atractivo al macizo desflorado durante todo el verano. Las Eschscholzias se conformarán, al igual que los iris, con un suelo seco y pobre. Los geranios, las salvias y las Libertias también acompañan muy bien a los iris. Taludes y bordes de restanques serán estabilizados por una plantación densa de antiguas variedades vigorosas que pueden permanecer en su lugar y requieren poco cuidado. Si el objetivo es más decorativo y el acceso para cuidados más fácil, se pueden elegir variedades más modernas, por ejemplo, intermedias, a menudo muy floríferas, que correrán menos riesgo que los grandes de inclinarse bajo el viento o la lluvia.

A los pies de un muro muy soleado, el abrigo del viento permite utilizar los grandes iris. Se pueden plantar en segundo plano de variedades más bajas y tempranas.

Borde de camino: toda la gama puede ser utilizada, desde las precoces enanas, hasta los grandes iris floreciendo en mayo, pasando por los intermedios (en tamaño y precocidad) y los iris llamados de borde, de tamaño mediano pero floreciendo con los grandes. Muy expuestos al viento, los grandes iris con flores pesadas corren el riesgo de caer si no están tutorados.

Borde de macizo: iris... de borde pero también enanos.

Borde mixto: toda la gama de tamaños puede ser utilizada, en primer plano o en último lugar, y según el tamaño de las plantas vecinas.

Macizo de Iris, el irisario: Una elección acertada permite obtener en primavera dos meses y medio de flores. La elección de iris "remontantes" ofrece algunas flores adicionales a finales de verano u otoño.

El huerto puede acoger algunas matas de iris ya que también es el lugar dedicado al cultivo de flores para cortar.