Lavanda angustifolia Arctic Snow

La Lavandula angustifolia 'Arctic Snow' es una nueva variedad de lavanda oficinal, llamada lavanda verdadera, que se distingue por su abundante floración estival de un blanco muy puro. Compacto y denso, este subarbusto se transforma en una verdadera bola de luz, magnífica en medio de plantas más oscuras. Su vegetación densa, así como su floración, van acompañadas de un auténtico aroma a lavanda. Decorativa en invierno, su fino follaje verde-gris será aún más claro y brillante si el verano es seco y caluroso. Brinde a esta bonita lavanda una exposición muy soleada y un suelo perfectamente drenado en una rocalla o en un macizo sobre gravas. 

La Lavandula angustifolia, a veces llamada Lavanda 'verdadera', es una planta de la familia de las lamiáceas, prima de las salvias, tomillos y romeros. Esta especie silvestre es originaria de las montañas mediterráneas, y crece de forma espontánea en Provenza, donde aún se cultiva para la producción de aceite esencial. Es una planta de suelos calizos y pobres, que aprecia los terrenos rocosos y pedregosos. Su rusticidad es buena, del orden de -15°C como mínimo, en un suelo muy drenante, sin embargo.

La variedad 'Arctic Snow', seleccionada en Inglaterra,  forma un arbusto de pequeño porte, de entre 45 y 50 cm de altura por 50-60 de ancho. Su porte es denso, la planta es vigorosa y forma en pocos años una bonita mata tupida y redondeada. Su follaje, decorativo y persistente en invierno, está compuesto por pequeñas hojas estrechas, muy aromáticas. Su color es intermedio entre el verde y el gris, parecerá más claro en verano en un suelo seco, cubriéndose con una pelusa más espesa para limitar la pérdida de agua por evaporación. Este fenómeno refleja una buena adaptación de la planta a la sequía estival. En julio-agosto, esta lavanda se cubre de una multitud de pequeñas flores muy blancas, muy perfumadas y melíferas, que se apiñan en cortos espigas cilíndricas de 4 a 5 cm, en el extremo de delgados tallos leñosos y foliados. 

Por su aspecto gráfico y salvaje, el color de su follaje y sus flores de un blanco puro, una infinidad de posibilidades se abren al jardinero. Se puede asociar la lavanda 'Arctic Snow' con gramíneas como Stipa pennata o Stipa tenuifolia, que, por su porte despeinado, contrastarán con su forma redondeada y reproducirán así una asociación armoniosa, de aspecto muy natural. También quedará maravillosa asociada a onagras, lino vivaz, asfódelos, euforbias o arbustos oscuros como coníferas y madroños enanos, o mirtos de Tarento. Combina bien con Iris germanica, Hemerocallis y una pequeña campanita morada provenzal llamada Ipomea althaeoides. También se pueden crear macetas muy bonitas para colocar en la terraza o en un balcón, para disfrutar de su aroma. También es posible combinar varias variedades de lavandas juntas, que formarán así un cuadro elegante, tanto por la variedad de colores de las flores y del follaje, como por el tamaño y el volumen de las plantas. 

Propiedades: La lavanda fina al ser una planta muy melífera, contribuye a la salvaguarda de las abejas : el néctar de su flor atrae a las abejas, que lo convierten en uno de los mieles más reputados. En Provenza se destila la planta para obtener un aceite esencial muy buscado en perfumería y aromaterapia. Sus numerosas virtudes terapéuticas siguen siendo muy utilizadas : su aceite esencial tiene propiedades antisépticas, antiespasmódicas, cicatrizantes, depurativas, diuréticas, entre otras…