Lavanda angustifolia Siesta

La Lavandula angustifolia 'Siesta' es la variedad más alta de lavandas finas con flores oscuras! Es una selección robusta que presenta un cojín compacto y regular de hojas lineales gris plateado. De junio a julio, emite espigas cortas, perfumadas de flores azul violeta profundo que se elevan sobre tallos de 80 cm de altura. Cultivar que soporta muy bien la poda. Planta vivaz versátil para jardines soleados, prosperando en terreno seco, pobre y bien drenado.

Esta variedad de lavanda pertenece a la familia de las lamiáceas, es originaria de las regiones mediterráneas del sur de Europa. Forma un arbusto de pequeño tamaño que alcanza 50 cm en todos los sentidos, con porte erguido, muy compacto, denso y robusto, formando un mata tupida redondeada. Su foliaje decorativo persistente está compuesto por hojas estrechas aromáticas de un hermoso color luminoso, gris plateado. En verano, esta lavanda se cubre de flores perfumadas y melíferas, llevadas por cortas espigas cilíndricas, en la punta de tallos leñosos. Esta lavanda azul oscuro requiere, como la mayoría de las lavandas, ser plantada a pleno sol en un suelo ordinario (incluso seco y pedregoso), muy bien drenado. En una situación soleada y cálida, su follaje verde será brillante y sus flores exhalarán un intenso perfume.

Planta ornamental y mediterránea por excelencia, la lavanda puede ser utilizada en macizos, aislada, bordes, rocallas, macetas, bordes marinos e incluso en setos bajos floridos. Por su aspecto gráfico, el color de su follaje y sus flores azul profundo, se abren infinitas posibilidades al jardinero. Se puede asociar la lavanda 'Siesta' con gramíneas o con gauras que, por su porte despeinado, contrastarán con su forma redondeada y crearán así una escena muy gráfica. También lucirá maravillosa al pie de rosales trepadores, asociada con arbustos como , cistus, rosales paisajistas, salvias arbustivas; o mezclada con Iris germanica y amapolas. También se pueden crear bonitas macetas para colocar en la terraza o en un balcón. También es posible combinar varias variedades de lavandas juntas, que compondrán así un cuadro muy armonioso y elegante, tanto por la variedad de colores de las flores y el follaje, como por el tamaño y el volumen de las plantas.

Propiedades: La lavanda al ser una planta muy melífera, contribuye a la salvaguarda de las abejas: el néctar de su flor atrae a las abejas, que lo convierten en uno de los mieles más reputados. La lavandula angustifolia es una planta oficinal, cuyas virtudes terapéuticas eran antaño muy utilizadas: su aceite esencial tiene propiedades antisépticas, antiespasmódicas, cicatrizantes, depurativas, diuréticas...

Anécdota: En la época de los romanos, las mujeres que querían probar en secreto el vino (bebida que les estaba prohibida), masticaban unas ramitas de lavanda para perfumar su aliento y así engañar la vigilancia de sus maridos.