Lavanda pinnata - Matorrisco de Lanzarote

La  Lavandula pinnata var. Pinnata también conocida como lavanda de Canarias o de Madeira, es una especie bastante rara en cultivo, sin duda debido a su baja rusticidad. Se reconoce por su  hermoso follaje pinnado, finamente cortado, verde-gris plateado que recuerda un poco al de un helecho. Su floración malva rosada es muy prolongada, de primavera a verano, pudiendo florecer todo el año si se protege del frío. Decorativa incluso en invierno, aromática en todas sus partes, esta lavanda forma una masa ligera, bellamente aérea y luminosa que destaca en el jardín seco, en rocalla, pero también en maceta en la terraza.

La Lavandula pinnata var. Pinnata pertenece a la familia de las lamiáceas. Se trata de una subespecie de la lavanda pinnada nativa del archipiélago de Canarias (La Palma, Lanzarote) y de Madeira. Bastante vigorosa pero poco resistente, esta lavanda no soporta temperaturas inferiores a -5 ºC en un suelo seco. Es un arbusto con tallos leñosos de sección cuadrangular cuyo follaje persiste en invierno. La lavanda pinnata var. Pinnata forma en unos pocos años un mechón arbustivo más ancho que alto, de unos 60 cm de altura por 80 cm de envergadura. Su follaje plano de textura un poco gomosa está cortado en lóbulos estrechos y ligeramente espátulados, cubiertos de una pelusa sedosa blanca. El color del follaje será tanto más claro y plateado cuanto más seco esté el suelo y haga calor. Desprende al menor roce un aroma terroso y alcanforado, a la vez potente y suave, que permanece brevemente en los dedos. La floración se extiende de mayo-junio a septiembre, siendo más o menos desfasada y prolongada según el clima y las condiciones de cultivo. En el extremo de largos tallos foliados que destacan claramente del follaje se abren espigas florales con 2 a 3 ramificaciones. Las flores bilabiadas, apretadas unas contra otras, lucen un color intermedio entre malva y rosa. Muy perfumadas, son muy visitadas por los insectos polinizadores. Los tallos foliados y las flores, una vez secos, pueden utilizarse en armarios para perfumar la ropa y alejar las polillas.

Por su silueta un poco borrosa, la singular belleza de su follaje y su aroma, la lavanda pinnata var. Pinnata es una de las favoritas de los coleccionistas que a veces la cultivan como anual o como planta de orangerie. Tiene su lugar en un jardín del litoral mediterráneo, muy suave en invierno y seco en verano. Esta hermosa planta se combina perfectamente con otras grandes lavandas (Lavandula Merloo, Walburton's Silver Edge y dentata), con cistes, romeros, teucriums y otros arbustos de matorral. También quedará maravillosa entre onagros, lino azul, asphodèles, euforbias o arbustos oscuros como coníferas enanas. Se combina especialmente bien con una pequeña campanita morada provenzal llamada Convolvulus althaeoides.

Consejo: la rusticidad de esta lavanda no supera los -5ºC en un suelo muy drenante y seco: se cultivará, fuera de nuestras regiones más benignas, en una gran maceta que se invernaría en un lugar luminoso pero no calefaccionado.