Ortiga de Russel - Monarda bradburiana

La Monarda bradburiana o Bergamota silvestre de Bradbury es una especie botánica norteamericana que forma hermosos manojos floridos de rosa suave en primavera. Sus flores dispuestas en capítulos, más decorativas que las de la bergamota silvestre, reúnen numerosos floretes rosa lavanda pálido. Su follaje aromático puede ser utilizado en infusiones. Además, la planta es decorativa en otoño, por su vegetación que se tiñe de púrpura, y hasta en invierno por su fructificación que perdura mucho tiempo. Muy rústica, es una excelente vivaz para los macizos campestres o románticos, en cualquier suelo drenado.

La Monarda bradburiana pertenece a la familia de las Lamiáceas. Es una planta vivaz originaria del centro y sureste de los Estados Unidos (Arkansas, Alabama, Iowa, Missouri, Texas...) donde se la encuentra creciendo en matorrales, en los bordes de los bosques, en praderas y al borde de los caminos, en terrenos rocosos o ricos en gres. Su vegetación emerge en primavera y se seca a finales de otoño. Adulta, forma un hermoso manojo de 60 cm de altura, con poca tendencia a producir chupones debido a su raíz rizomatosa. Esta monarda florece de mayo a julio. En el extremo de sus tallos se abren cabezas de flores de 4 a 6 cm de diámetro, compuestas por floretes dispuestos en verticilos, es decir, en corona. Estas flores bilabiadas, de dos labios, son de color rosa suave, moteadas de púrpura en el labio inferior. Las flores de esta Bergamota son muy melíferas, atraen abejas y mariposas. Las hojas de la Monarda bradburiana, miden de 5 a 8 cm de largo, son de forma lanceolada (en forma de lanza) y dentadas en el borde. Son de color verde grisáceo, con venas prominentes. Son hojas muy aromáticas, utilizadas para saquitos perfumados y potpourríes. Con el frío, se tiñen más o menos de púrpura o burdeos al final de la temporada. Después de la polinización se forman cabezas de frutos en forma de bolitas, decorativas, que contienen semillas. Esta planta puede sembrarse de manera natural si las condiciones le son favorables, sin volverse invasiva.

La Monarda bradburiana se desarrolla al sol, o en media sombra, en cualquier suelo fresco, pero drenado, e incluso poco profundo y rocoso. Plántela en pequeños grupos en un jardín romántico, en una pradera florida o en un borde mixto en compañía de otras hermosas plantas silvestres como las Rudbeckia, Carex comans, Eragrostis spectabilis, campanillas y otras gramíneas. También es una compañera encantadora para los rosales paisajísticos y las agastaches.