Peonia lactiflora Nippon Beauty

La Paeonia lactiflora Nippon Beauty es una peonía herbácea de tipo japonés un poco teatral, en rojo y oro. Sus flores simples muestran hermosos pétalos de un rojo amaranto casi granate, dispuestos en forma de copa alrededor de un corazón compuesto por pétalos del mismo rojo que se vuelven dorados en la madurez. Esta variedad de porte compacto ofrece una floración tardía pero prolongada, a partir de finales de mayo. La belleza fastuosa de las flores se acompaña de un ligero perfume y la planta, vigorosa, se adapta bastante bien a los suelos secos.

Las peonías herbáceas provienen principalmente de la Paeonia lactiflora, una planta herbácea vivaz originaria de Asia central y oriental (desde el este del Tíbet, al norte de China, hasta el este de Siberia), donde crece de forma natural en bosques y praderas. Esta planta pertenece a la familia de las ranunculáceas o de las peoniáceas.

La variedad 'Nippon Beauty' fue introducida en los EE. UU. en 1927 por Auten. La planta forma a partir de la primavera un sólido mechón herbáceo y frondoso pero rechoncho, alcanzando generalmente los 70 cm en todos los sentidos. Sus flores, anchas de 14-15 cm, aparecen al final de la temporada de peonías, en mayo-junio, durante aproximadamente cuatro semanas, cada una viviendo de 7 a 10 días. Nacen como un gran botón rojo y luego se abren en una corola de amplios pétalos redondeados de un rojo amaranto profundo. En el centro de la flor se encuentra un pompón compuesto por finas piezas florales: algunas estambres se transforman aquí en pequeños pétalos finos, rizados, otros son estériles, los estaminodios, sin anteras. Todas estas piezas florales son rojas bordeadas de crema al abrirse, el borde crema se vuelve amarillo dorado en plena floración. El follaje joven se despliega en grandes hojas verdes y brillantes, muy recortadas. Son llevadas por un pecíolo que se divide en 3, con segmentos lanceolados u ovales-lanceolados. En esta variedad, las flores son muy ligeramente perfumadas. Los folíolos son enteros o a veces lobulados. Desaparecen en invierno, mientras persisten en el suelo los brotes que se desarrollarán en primavera. Esta planta muy perenne crece a partir de una gruesa raíz carnosa que no aprecia ser trasladada.

Las peonías son parte de esas plantas que constituyen la base de un jardín. Antaño, cada jardín, desde el más modesto hasta el más elaborado, exhibía en primavera con orgullo mechones cubiertos de flores que se abrían camino hasta la casa, acompañando en cada ramo al lila morado y a las campanillas azules. Opulenta y generosa, la peonía Nippon Beauty se instala en masa, o en el borde de un pasillo, asociada con perennes intemporales y sin pretensiones como las aquilegias, las campanillas, las gramíneas, los claveles o las rosas de Navidad. También aumentará la reserva de flores para ramos, en el huerto. Solo no se recomienda el cultivo en maceta, ya que no se satisfarán sus necesidades. Con el tiempo, la peonía se vuelve majestuosa y florece cada vez más abundantemente, produciendo hasta 60 flores. Cabe señalar que las flores de Nippon Beauty a veces carecen un poco de durabilidad en un jarrón.