Polygonatum odoratum - Sello de Salomón

El Polygonatum odoratum, más conocido como Sello de Salomón fragante, es una especie botánica presente de forma natural en los sotobosques de gran parte de nuestro territorio, incluyendo Córcega. Se trata de una pequeña planta vivaz de sombra o semisombra particularmente fácil de aclimatar en el jardín, en la mayoría de nuestras regiones. Ofrece en primavera, suspendidas en tallos foliados ligeramente curvados, flores tubulares sutilmente perfumadas. Casi blancas, con toques de verde en sus extremos, recuerdan un poco a largas campanillas de muguet, para luego dar paso a pequeños frutos esféricos azul-negro. Perfectamente resistente, esta pequeña planta silvestre se extiende como planta cubresuelos a través de sus rizomas, vistiendo y perfumando la base de arbustos en primavera, junto a narcisos o campanillas de invierno.

El polygonatum officinale pertenece a la familia de las liliáceas (o de las asparagáceas según la clasificación), es el sello de Salomón perfumado que habita en nuestros sotobosques europeos. En Francia, se encuentra desde el norte hasta el extremo sureste mediterráneo, y hasta los 2000m de altitud en los Alpes. Planta herbácea y vivaz, se desarrolla a partir de un rizoma carnoso de color ocre y emite en primavera tallos angulosos y foliados hacia arriba, erectos y colgantes a la vez, de 40 cm de altura en promedio (de 30 a 50 cm según las condiciones de cultivo). Este sello de Salomón formará a la larga colonias ocupando al menos 60 cm de suelo. El follaje es caduco, las hojas ovales están dispuestas en dos hileras opuestas. La lámina foliar es de un verde oscuro brillante. Las hojas miden de 4 a 8 cm de largo, son de forma oval lanceolada y presentan venas marcadas. La floración se produce de abril a junio según el clima, en forma de flores tubulares con un extremo verde oscuro, de 1 a 2 cm de largo, solitarias o en pares, colgantes, naciendo en la axila de las hojas. Esta floración es más o menos perfumada según las flores. Le siguen frutos azul-negro, esféricos, de 2 a 6 mm de diámetro. La planta entra en reposo al final del verano. El sello de Salomón, al igual que el muguet, es una planta muy bonita pero tóxica, cuidado con los exploradores en ciernes que pueblan sus jardines.

A menudo un poco lento para establecerse, este sello de Salomón es sin embargo fiel, vive mucho tiempo, tiene muy pocas exigencias y requiere poco cuidado. Tolera muy bien la competencia de las raíces de los árboles y arbustos. Se instalará en sotobosques o en sol tenue (introducir varias plantas en una pequeña superficie), para acompañar las floraciones primaverales de Magnolias, Kolwizia, Deucias, espiraeas, lilas, ciruelos en flor. En estos macizos al pie de los arbustos, acompáñelo de la Anémona 'Robinsoniana', de Macleayas, de Anémona Blanda y de ranúnculos amarillos. En la naturaleza, el Sello de Salomón convive fácilmente con el muguet. Haga lo mismo y embellezca esta bonita escena de sotobosque añadiendo narcisos, campanillas de invierno o nivéoles así como escilas azules de las que tomará el relevo.

La explicación más común del nombre Sello de Salomón provendría del aspecto de las cicatrices dejadas en los rizomas una vez que se secan los tallos florales, que se asemejan al sello de seis ramas de los reyes Salomón y David. El rey Salomón también habría descubierto las virtudes medicinales de los Polygonatum. En la actualidad, todavía se utiliza la savia destilada de los rizomas en cosmética.