Hierba mora - Verbena bonariensis

La Verbena bonariensis, también conocida como Verbena de la Patagonia, estalla bajo el sol con un desfile de mariposas multicolores revoloteando. Esta gran planta vivaz, tan sencilla y poco exigente, es una encantadora vagabunda de pie ligero, cuya floración aérea en panículas violáceas de aspecto "nuboso" destila mucha elegancia. Aporta mucha ligereza a las plantas que la acompañan. En floración desde finales de primavera hasta otoño, es poco longeva y moderadamente resistente, pero se siembra de manera natural en suelos ligeros, incluso pobres y secos, en plena luz.

La Verbena de la Patagonia es una planta de la familia de las verbenáceas originaria de América del Sur, desde Brasil hasta Argentina. En floración, la planta alcanza fácilmente 1,20 m de altura, 20 a 30 cm para el follaje y 50 cm de ancho. Sus hojas basales, verdes, alargadas, con bordes dentados, son más o menos persistentes según el frío invernal. A finales de primavera, vigorosos tallos cuadrados de textura rugosa se elevan hacia el cielo, ramificándose en la parte superior. Llevan numerosas inflorescencias redondeadas, en panículas compuestas por numerosas flores diminutas y tubulares, perfumadas, de color malva con brácteas púrpuras que atraen a numerosos insectos libadores. La floración continúa hasta octubre, con un período de reposo en julio cuando la sequía es demasiado intensa. La vida de esta verbena es bastante corta, pero produce muchas semillas que germinan fácilmente en una tierra ligera.

Como una cortina ligera, la Verbena de la Patagonia filtra las perspectivas y da profundidad a los macizos. Fácil de cultivar siempre que esté al sol, vivaz y relativamente resistente, es magnífica en un jardín natural, en compañía de gauras, verbenas, oenotheras, Artemisa blanca o achilleas. También se puede utilizar con éxito para aligerar un macizo de grandes flores como los dalias o las Peonías arbustivas. También se puede cultivar en una maceta grande para disfrutar plenamente de su larga floración.