Verbena - Verbena officinalis

La Verveine officinale o Verbena officinalis es una planta vivácea de rusticidad media, muy florífera con sus múltiples flores violeta claro en espigas. Su porte redondeado, esbelto y robusto aporta una ligereza muy viva al jardín.

La Verveine officinale es una planta herbácea de 50cm de altura, con tallos vellosos, angulosos, ramificados que llevan hojas caducas, opuestas, largas, profundamente divididas en lóbulos dentados. De junio a octubre, surgen inflorescencias en los extremos de los tallos en espigas sueltas y delgadas con múltiples flores violeta claro a azul pálido.

La Verbena officinalis prefiere un suelo rico, seco, bien drenado, no calcáreo, en situación soleada. En estado natural, crece en los bordes de caminos en terrenos secos e incultos. Se utiliza en macizos, platabandas pero también en macetas en balcones o terrazas. Se puede esquejar fácilmente pinchando un trozo de rama en la tierra. En inviernos rigurosos, puede resistir si el agua no se estanca y protegiéndola del frío.

La Verveine officinale también se cultiva como planta aromática para la recolección de sus hojas. Estas, infusionadas, alivian neuralgias, reumatismos, dolores gástricos. Excelente tónico circulatorio, curan piernas pesadas, y en compresas calientes también contusiones y esguinces.

También llamada Verbena común, fue la Hierba sagrada de los antiguos griegos y la Hierba de Venus de los romanos por sus virtudes contra las enfermedades más variadas. Su tanino particular incluso le hizo tomar el nombre de Hierba de Sangre, ya que se coloreaba de rojo aplicado sobre la piel.

Consejo: Para conservar la verveine officinale en invierno, plántala contra una pared soleada o en maceta para resguardarla en un invernadero.