Allium ledebourianum - Ciboulette de l'Altaï

El Allium ledebourianum, también conocido como Ciboule del Altái, es una especie asiática con matas de follaje lineal que pueden alcanzar hasta 80 cm de altura. Llevan umbelas hemisféricas, densas, con flores de color rosa púrpura, con suaves matices de lavanda y rosa. Esta deliciosa especie se asemeja notablemente a la ciboulette clásica. Sin embargo, es aún más resistente. Es una planta aromática imprescindible y decorativa, fácil de cultivar, ideal para rocallas o macizos muy bien drenados, que soporta tanto el frío como los veranos secos.

El Allium ledebourianum pertenece a la familia de las aliáceas (anteriormente liliáceas). Es una especie originaria de Asia central y del noreste: Kazajistán, Mongolia, Rusia y China. Se encuentra a altitudes de hasta 1800 m. Produciendo, sobre un follaje lineal que puede alcanzar de 40 cm a 60 cm, e incluso 80 cm de altura, finos racimos de flores redondas en forma de estrella. Los tépalos son de color púrpura claro con una nervadura central púrpura más oscura. Florece en verano.

La ciboulette del Altái desarrolla flores deliciosas, en tallos finos, similares a nuestra ciboulette común. Puede prosperar en diversas condiciones, en parterres soleados, en rocallas o en el huerto. No teme ni las inclemencias del tiempo ni la negligencia, y produce una profusión de flores que atraen a los polinizadores como abejas y mariposas. Lo importante es que el suelo se mantenga seco en verano y no demasiado húmedo en invierno. En el jardín ornamental, combínela con plantas perennes de terreno seco como Tipas, geranio de sangre, claveles gratianopolitanus, santolinas y oréganos para una decoración que recuerde a las garrigas mediterráneas.