Rosal Barbados

Los rosales prefieren una situación soleada (al menos 4 a 5 horas de sol al día) pero resguardada de los rayos ardientes del mediodía y del viento fuerte. Realice la plantación de octubre a abril. Los rosales aprecian los suelos sueltos, permeables y ricos en humus. Prefieren un suelo ligeramente ácido pero se adaptarán en cualquier jardín siempre que el terreno esté bien trabajado y sea suficientemente rico. Para instalar su rosal en macetas, trabaje su suelo en un cubo de 25 cm desmenuzando bien la tierra y colocando en el fondo del hoyo de plantación una enmienda básica como sangre seca o cuerno deshidratado, coloque su planta liberada de su maceta cubriendo la parte superior del cepellón con 3 cm de tierra, rellene y riegue abundantemente para expulsar las bolsas de aire. En tiempo seco, es necesario regar regularmente durante algunas semanas para facilitar el enraizamiento. También piense en proporcionar a su rosal un abono especial para rosales que estimula la floración de las plantas. Cada año, de febrero a marzo, corte los tallos principales entre 20 y 25 cm sobre el suelo en un clima templado y entre 50 y 60 cm en un clima más cálido. Corte también los brotes laterales a 10-15 cm. Luego elimine los tallos delgados y débiles. Los rosales pueden ser susceptibles al oídio, a las manchas negras y a la clorosis. Los pulgones y las cochinillas los atacan.

Los rosales a menudo presentan manchas o aspecto feo a finales de verano, pero no es un problema para su desarrollo. Estas manchas no son peligrosas para el rosal, es un fenómeno natural. Siga todos nuestros consejos para remediarlo y consulte nuestro artículo: ¡Socorro! Tengo manchas en mis rosales