Clerodendrum trichotomum - Arbol del destino

El Clerodendron trichotomum, también conocido como Árbol de la suerte, Árbol del clero o Árbol del destino, es un arbusto de aspecto exótico con una excepcional floración otoñal perfumada. Está adornado posteriormente con una profusión de bayas turquesas engastadas en un estuche rosa brillante. Este arbusto requiere muy poco mantenimiento y rara vez enferma.

Forma un gran arbusto aireado de forma redondeada, que alcanza los 3-4 m de altura por 2 a 3 m de ancho. Si se cuida de cortar las ramas bajas, puede formar un pequeño árbol, alcanzando hasta 5-6 m de altura. Las ramas jóvenes son pubescentes, lo que lo diferencia de la otra especie resistente del género Clerodendrum bungei.

Sus grandes hojas opuestas, caducas son ovales, terminadas en punta y fuertemente nervadas, de un verde medio y peludas en el envés. Más grandes en los sujetos jóvenes, pueden medir de 17 a 25 cm de largo por 5-15 de ancho y presentan un fino dentado. Al ser arrugadas, desprenden un curioso aroma a cacahuete más o menos apreciado, pero que permite identificarlo inmediatamente. Las hojas aparecen tardíamente en primavera y no son especialmente decorativas en otoño ya que caen con las primeras heladas, pero el arbusto ofrece muchas otras ventajas.

En agosto-septiembre, el árbol de la suerte produce una floración rica y abundante de aspecto casi exótico. Las pequeñas flores blancas estrelladas, llevadas por un cáliz alargado anguloso amarillo lavado de púrpura, se reúnen en panículas de aproximadamente 15-20 cm de ancho, muy perfumadas. La corola forma un tubo terminado por 5 pétalos de donde surgen 4 estambres y un estilo como todos los miembros de la familia de las Lamiáceas (anteriormente Verbenáceas).

El arbusto se adorna en otoño con una profusión de bayas, no más grandes que grosellas, pero de un intenso color turquesa, encajadas en un cáliz rojo brillante. Esta fructificación es más o menos regular según los años y el clima.

Resistente (-15°C) y fácil de cultivar, crece al sol o a media sombra, en todo tipo de suelo drenante y fresco sin exceso de caliza. Solo teme los suelos pesados, encharcados en invierno y los excesos de calor en verano. Al igual que la angélica en árbol (Aralia elata), sus raíces a veces pueden emitir vástagos, pero esta especie emite muchos menos que Clerodendrum bungei. Su crecimiento es rápido y su longevidad superior a 30 años. A veces es atacado por cochinillas.

¡No te prives del perfume de la floración de Clerodendrum trichotomum colocándolo cerca de un lugar de vida o paso! En un jardín pequeño, plántalo aislado para formar un pequeño árbol de sombra. Embellecerá el lugar con su intenso perfume y su floración original desde finales de agosto hasta octubre, cuando la mayoría de las plantas del jardín están terminando la floración. Sin embargo, evita estacionar el coche debajo ya que las frutas manchan y atraen a los pájaros. El arbusto también es una planta ideal para setos floridos y gusta a los pájaros que se deleitan con las frutas. Combínalo con arbustos de bonitas coloraciones otoñales como el forsythia, membrillero del Japón, Avellano mágico, amelanchier, arce del Japón o rosales remontantes amarillos como Celina. Los amantes de plantas raras lo combinarán con un Euodia daniellii, rosales botánicos, un evónimo caduco o un Parrotia persica, una vid de adorno con hojas suntuosas en otoño. 

Coloca plantas perennes de floración tardía como los Helianthus microcephalus, Heliopsis, asters en primer plano… 

La reputación de friolero de este clérodendron no está justificada, al igual que a menudo son sesgados sus requisitos de cultivo: se trata de una planta tolerante con respecto al suelo, pero también al frío una vez establecida. Aportará un toque exótico a un seto libre o a un macizo arbustivo.

El nombre del género Clerodendrum viene del griego kleros que significa "clero" y de dendrum "árbol". Este género reúne más de 400 especies mayoritariamente tropicales (África tropical y Asia del Sur) compuestas por árboles, arbustos, trepadoras y herbáceas. Este nombre "árbol del clero" se le dio para recordar su uso en las ceremonias religiosas indo-malayas. La especie trichotomum puebla los bosques y matorrales de Japón, Corea, este de China y Filipinas, hasta los 2300 m de altitud. La variedad fargesii es una forma un poco más resistente (-20°C) del oeste de China, llevada al Arboreto de Vilmorin por el padre Farges en 1898. Sus hojas jóvenes son bronce, el cáliz verde, las ramas y hojas glabras, pero los frutos son menos llamativos que en el tipo.