Tomate de culebra Preciosa

El Physalis pruinosa, Tomate verde o también conocido como Cerise de terre, al igual que su pariente mayor el Physalis Peruviana, es originario de América del Sur (Perú, Chile, Colombia) y se ha aclimatado en muchas zonas como Sudáfrica o Australia. Presenta pequeños frutos amarillos a naranja brillante encajados en un cáliz con forma de farol chino. Su sabor es ácido y recuerda al de la mandarina. El cáliz y el fruto son pequeños en esta variedad, pudiendo alcanzar el tamaño de una cereza grande, de ahí su denominación de Cerise de Terre. Su silueta exótica demuestra una vez más que el huerto puede ser tanto alimenticio como estético. La siembra se realiza de mayo a julio y la recolección de los cáliz comienza a finales de junio, aproximadamente dos meses después de la siembra.

La Tomate verde o Physalis pertenece a la familia de las Solanáceas y produce tallos rastreros, lo que le ayuda a obtener su hermoso porte extendido. La floración comienza a principios del verano y da paso rápidamente a la fructificación, que se asemeja a una linterna de papel de color verde o blanco. Contienen una multitud de pequeñas semillas que se auto siembran de un año a otro. Cuando están maduros, los frutos de esta variedad tienden a caer al suelo.
Hoy en día, los Physalis se utilizan para decorar pasteles, en compotas, mermeladas, clafoutis, pero también en preparaciones más picantes como la salsa mexicana Salsa verde. Y desde siempre en fitoterapia, se le reconoce por sus cualidades depurativas y antioxidantes. ¡Atención, las bayas son tóxicas si se consumen verdes!

La recolección: el Physalis pruinosa se recolecta a partir de finales de junio, cuando los frutos han adquirido su hermoso color amarillo dorado y el cáliz está bien color pergamino. Cuando están maduros, tienden a caer. Un pie puede producir varias decenas de frutos.

La conservación: los frutos de Physalis se consumen generalmente frescos. Se conservan algunos días en el cajón de verduras de su refrigerador. También se pueden secar. Se dejan en un lugar seco y ventilado sin contacto entre ellos y pueden conservarse así durante varios meses.

El truco del jardinero: a veces, los Physalis son propensos a infestaciones de Moscas blancas. Estos pequeños insectos blancos de la misma familia que los pulgones solo son molestos si están en gran cantidad. Un purín de menta piperita o incluso una pulverización de agua mezclada con jabón negro los eliminará sin necesidad de químicos. Los depredadores naturales de los pulgones también son recomendables, como las mariquitas o las crisopas. Y para proteger sus plantas de los nematodos, unos clavos de olor cerca serán bienvenidos.