Tulipán híbrido Darwin Tequila Sunrise

Los bulbos de tulipanes se plantan de octubre a mediados de diciembre para una floración en primavera. Instálalos al sol o eventualmente a media sombra, en un lugar resguardado. Los tulipanes aprecian los suelos ricos, bien drenados y soportan los suelos secos en verano. Si tu tierra es muy arcillosa, incorpora arena a la tierra antes de la plantación o instala algunas gravas en el fondo del agujero de plantación.

Trabaja la tierra en profundidad y elimina las hierbas no deseadas o las piedras. Cava un agujero con la ayuda de un plantador de bulbos y entierra los bulbos, con la punta hacia arriba, a dos o tres veces su altura. Separa los bulbos unos 10 cm aproximadamente. Los bulbos se pueden plantar de forma aislada o en grupos de 5 a 10 para un bonito efecto de color. Puedes disponerlos uno a uno en el suelo o 'arrojarlos' al suelo, para un efecto más natural en los macizos. Riega ligeramente después de la plantación.

Para una plantación en macetas, prevé un drenaje en el fondo de la maceta (bolas de arcilla o gravas) y luego instala los bulbos en una mezcla de tierra, tierra vegetal y un poco de arena. Aporta una pequeña cantidad de compost en la floración.

El tulipán requiere poco mantenimiento. Riega en primavera si es necesario. Elimina las flores marchitas para no agotar el bulbo. Después de la floración, deja que la hoja muera naturalmente y córtala solo cuando se vuelva amarilla, para favorecer la acumulación de nuevas reservas en el bulbo.

A diferencia de los tulipanes botánicos, los tulipanes de grandes flores degenerarán después de 2 a 3 años si se dejan en tierra. Puedes optar por dejarlos en su lugar y renovarlos regularmente. Si deseas prolongar la floración, desentierra los bulbos cuando la hoja esté seca. Elimina la tierra alrededor de los bulbos y consérvalos en un lugar fresco y seco, en la oscuridad. Plántalos luego en el otoño siguiente.