Gladiolo Mix

Esta mezcla de gladiolos de grandes flores reúne varias variedades elegidas por la belleza de sus grandes corolas. Con colores suaves o brillantes, lisos o bicolores según las plantas, se agrupan en altivos bohordos florales, visibles desde lejos en los macizos de flores. El gladiolo, combinando la majestuosidad de su porte y la fantasía de sus colores, es una flor que permite crear sorprendentes contrastes, elegantes combinaciones o asociaciones románticas, tanto en terreno abierto como en ramos caseros.

Originarias de África, Europa, Medio Oriente, pertenecientes a la familia de las Iridáceas, las especies de gladiolos más coloridas provienen de Sudáfrica. Los gladiolos cultivados son híbridos de grandes flores, están divididos en 3 grandes grupos: Grandiflorus (de grandes flores), Primulinus y Nanus (mariposas). Esta selección reúne variedades que pertenecen todas al grupo de Grandiflorus. El gladiolo es una planta herbácea vivaz provista de cormos (bulbos globulares), con hojas anchas en forma de espada, dispuestas en abanico, formando un manojo de aproximadamente 90 cm de altura, según las condiciones de cultivo. Las hojas están coronadas por una inflorescencia en espiga cuyas flores en forma de embudo, con más de 10 cm de diámetro, están dispuestas unilateralmente, casi todas del mismo lado del sólido tallo floral.

Los gladiolos y sus largos y coloridos tallos, a menudo un poco exagerados, son el símbolo de los años 70 y de composiciones florales algo rígidas. Si bien son insustituibles en ramos, en los jardines, su silueta necesita la compañía de plantas con follajes opulentos o, por el contrario, ligeros, que realzarán su floración algo exuberante. Plántelos en grupo en los macizos de salvia, pequeñas gramíneas, bocas de lobo, bergamotas, claveles y nomeolvides para formar grandes ramos coloridos. Son habituales en los pequeños jardines amurallados, donde acompañan a las verduras hasta el huerto. Para hacer ramos, corte los tallos florales cuando el primer ramillete se abre. Plántelos a intervalos de dos semanas desde principios de primavera hasta finales de junio para florecer en casa y en el jardín todo el verano.