Viola cornuta Sorbet Peach Melba F1 Hybrid - Violeta

La Viola cornuta Sorbet Peach Melba F1 Hybrid, también conocida como violeta cornuta híbrida, produce plantas compactas que forman pequeños mechones cubiertos de una abundancia de pequeñas flores en colores sorprendentes, en una mezcla de rosa y amarillo, manchadas de marrón rojizo. Esta planta bienal es fácil de cultivar, tolera el calor y es resistente al frío, floreciendo durante un período muy largo. Aportará un toque alegre y refinado a los bordillos, en el balcón o la terraza. Se cultiva en suelo húmedo y fresco, a pleno sol o en semisombra.

Perteneciente a la familia de las violáceas, la violeta cornuta, que crece espontáneamente en los Pirineos, es una planta vivaz de bajo porte que ha dado origen a numerosos híbridos y cultivares. A menudo cruzada con la Viola tricolor (pensamiento silvestre), sus descendientes más famosas son las pensamientos hortícolas. La variedad 'Sorbet Peach Melba F1 Hybrid', de la cual proviene, es una planta herbácea tapizante de 15 cm de altura en flor, con hojas persistentes verde oscuro, ovales y crenadas, formando un mechón extendido. Dependiendo de la fecha de siembra, esta planta se cubre de flores desde la primavera hasta el otoño. Sus flores compuestas por 5 pétalos se asemejan a las de pequeños pensamientos pero sus pétalos están dispuestos de manera diferente. Los dos superiores son erguidos, de color amarillo pálido matizado de rosa viejo, los tres inferiores están inclinados hacia abajo, en un tono amarillo vivo con una mancha marrón rojiza en el centro del pétalo. La base de estos tres pétalos está adornada con 'bigotes' rojos. La planta se extiende bastante rápidamente gracias a sus rizomas y también se autosiembra muy fácilmente en el jardín, no siempre fielmente.

Las violetas cornutas están destinadas a la floración en macizos bajos, borduras, pero también en macetas y balcones, donde se combinarán con otras plantas de floración primaveral y estival. (Nomeolvides, Narcisos enanos, Margaritas, Prímulas, Tulipanes botánicos, asters de verano y otoño…). Las flores de las violetas cornutas son comestibles, así que no dudes en decorar tus platos con una o dos flores, o incluso colocar algunas en tus ensaladas para darles un toque de color.