Veronica Pink Marshmallow

La Verónica (x) 'Pink Marshmallow' es una excelente variedad de Verónica híbrida seleccionada por su porte compacto, su follaje muy sano y su magnífica floración en tonos rosados. Es una planta vivaz resistente que ofrece una generosa floración llena de encanto y rica en néctar. Produce numerosas espigas erguidas, muy gráficas, cubiertas de botones de un rosa plateado que se abren en pequeñas flores que van del rosa intenso al rosa suave. Coloque esta bonita planta en un parterre, en el frente de un macizo o en una jardinera.

La verónica 'Pink Marshmallow' es un cruce hortícola entre dos especies botánicas: Veronica longifolia (la verónica de hojas largas) y V. spicata (la verónica en espigas). Es una planta vivaz de la familia de las plantagináceas, anteriormente clasificada en la de las escrofulariáceas. Muy resistente al frío (-30 °C), esta selección también es poco exigente en agua y su follaje no es sensible a enfermedades foliares como manchas (mildiu, oídio, roya...). Tolera bien los suelos calcáreos.

Este cultivar 'Pink Marshmallow' muestra una vegetación densa y bastante baja, alcanza aproximadamente 45 cm de altura en floración y 30-40 cm de diámetro. Sus tallos vellosos llevan hojas lanceoladas, de un bonito verde oscuro, con bordes finamente dentados. En verano, de junio a agosto y a veces hasta septiembre, produce en la punta de los tallos diminutas flores en forma de estrella, apretadas en espigas muy densas y erguidas. Esta floración es melífera y nectarífera. La vegetación aérea, caduca, se seca en invierno.

La Verónica 'Pink Marshmallow' se plantará en cualquier suelo bien drenado, incluso calcáreo, preferiblemente al sol. Si prefiere algo de frescura en su base, una vez bien establecida, tolera bastante bien los episodios de sequía moderada. Esta planta vivaz será muy útil para decorar la base de los rosales para macizos o en los bordillos floridos, asociada con equináceas rosadas ('Butterfly Kisses') o blancas ('Kismet White') y con salvias vivaces azules, blancas o rosadas, por ejemplo. Sus espigas rosadas aportan verticalidad y color a cualquier decoración. Esta verónica puede cultivarse perfectamente en macetas para embellecer el balcón o la terraza. Sus flores también son muy bellas en ramos de verano.