Pseudocydonia sinensis - Membrillero de China

Uno se pregunta por qué el Pseudocydonia sinensis, también conocido como Membrillero de China, no se planta más a menudo en nuestros jardines, dadas sus innumerables cualidades. Quizás debido a la reputación de ser una planta sensible al frío que lo ha precedido desde finales del siglo XIX. Este gran arbusto, sin espinas, ha demostrado desde entonces su capacidad para soportar inviernos muy fríos si se dan las condiciones adecuadas. Ofrece un interés permanente a través de su hermosa corteza, su floración primaveral rosa seguida de grandes membrillos comestibles y fragantes, sin olvidar sus colores otoñales incandescentes, que garantizan un espectáculo hasta bien entrada la temporada. Es una planta notable: magnífica, fructífera y resistente, que sin duda merece ser probada en el jardín ornamental, o incluso en el huerto. Su única exigencia: veranos largos y cálidos que permitan una buena maduración de los frutos y mejoren notablemente su resistencia al frío.

El Pseudocydonia sinensis es un pequeño árbol o gran arbusto de la familia de las Rosáceas, de crecimiento bastante lento. Es la única especie del género Pseudocydonia. Es originario de las provincias del sureste de China, donde crece hasta los 1000 m de altitud. El Pseudocydonia se distingue del Cydonia, el membrillero de nuestros huertos, por sus hojas lustrosas finamente dentadas en el borde, la ausencia de espinas, sus flores solitarias y no agrupadas en racimos, y sus frutos mucho más grandes y perfectamente lisos, sin pelusa. La rusticidad de esta planta será mejor en un clima continental o en nuestras regiones que experimentan largos veranos cálidos y un hermoso final de temporada: el calor permite que las ramas se lignifiquen bien antes de la llegada del invierno.

El Membrillero de China a menudo forma varios troncos que sostienen una corona arbustiva y extendida, pero puede ser fácilmente guiado como un pequeño árbol de tronco único mediante una poda adecuada. Con el tiempo, no es raro que un solo tronco supere a los demás. En la madurez, alcanzará en promedio 5 m de altura por 3,50 m de envergadura. Su corteza es muy decorativa: se desprende en placas a mediados de junio, grandes trozos de corteza rojiza desprendiéndose gradualmente antes de caer al suelo. De color gris-marrón, la corteza revela grandes zonas naranjas, decorativas durante todo el año.

Las hojas se desarrollan antes que las flores; son alternas, gruesas, de forma oval-lanceolada, de 5 a 8 cm de largo y 3 a 5 cm de ancho, con el borde finamente dentado. Su color es un verde brillante, son lustrosas en el haz. Los colores otoñales son fantásticos, pasando del naranja al rojo y al morado, realzados por el aspecto lustroso del limbo. Completamente caducas en climas muy fríos, las hojas de este membrillero pueden persistir en invierno en una exposición resguardada o en un clima suave. Permanecen adheridas a las ramas durante mucho tiempo, a veces hasta la aparición de nuevas hojas en primavera. El espectáculo de los membrillos amarillos mezclados con el follaje flamígero es magnífico en octubre-noviembre.

La floración del Pseudocydonia sinensis se extiende de abril a mayo, durante aproximadamente 3 a 4 semanas. Las flores, muy nectaríferas y melíferas, alcanzan un diámetro de 3 a 5 cm. Están compuestas por 5 pétalos cóncavos que forman una copa, de un rosa más o menos intenso según los individuos. Cada flor se abre revelando un corazón de estambres amarillos. Las flores son solitarias, llevadas por las ramas del año anterior. Son auto-fértiles, un solo pie de Pseudocydonia es suficiente para obtener frutos. Tras las flores, aparecen grandes frutos ovales llamados membrillos de China, primero verdes, que se vuelven amarillos y lisos al madurar. Cada uno mide hasta 20 cm de largo. Son comestibles tras la cocción. Los frutos de este membrillero son particularmente fragantes, y su pulpa es muy aromática. Se cosechan de octubre a diciembre según las regiones y se consumen de la misma manera que los membrillos que conocemos bien: en compota, en gelatina, en pastas de frutas o incluso en tajines.

El Membrillero de China es una planta de gran valor ornamental, bastante tolerante, pero que prospera particularmente bien en nuestros climas contrastados. Si bien le gusta el calor y el sol, este arbusto se adapta a todo tipo de suelos(ácidos, calcáreos, arcillosos, pesados, húmicos, limosos) que no retengan excesivamente el agua. Una vez bien establecido en un suelo profundo, incluso se adapta a la sequía estival. Se instala en el jardín ornamental o en el huerto. Elija para él una exposición bien visible, para poder contemplar sus encantos que se suceden y se suman a lo largo del año. El Pseudocydonia sinensis puede, por ejemplo, asociarse en una gran seto de paisaje de boscaje con Tetradium danielii (el árbol del miel), Parrotia persica, pequeños arces (monspessulanum, griseum, truncatum, palmatum dissectum), rosales botánicos  (Rosa hugonis, moyesii, complicata...), evónimos caducos, espino Paul's Scarlet, y muchos más. ¡Un solo fruto colocado en un recipiente perfumará muy agradablemente su sala de estar o su salón! También se cultiva como bonsái.

Usos, propiedades:

Los membrillos de China se utilizan tradicionalmente en la medicina china y japonesa en forma de jarabe y bebidas para tratar los dolores de garganta. Los coreanos también les atribuyen propiedades medicinales, los utilizan para tratar la tuberculosis y el asma. 

En cocina: para hacer gelatinas, agregue pectina ya que la naturalmente contenida en las semillas no es suficiente para gelificar la preparación.